El papa Francisco pidió perdón el lunes por la persecución de la Iglesia católica contra miembros de una pequeña confesión evangélica en Italia, que vio a su líder excomulgado y a sus fieles tachados de herejes durante la Edad Media.Francisco presentó su disculpa durante la primera visita de un pontífice a un templo valdense y comenzó el segundo día de su visita a Turín con un sólido mensaje ecuménico sobre inclusión y fraternidad cristiana.
Pedro Valdo, un adinerado comerciante de Lyon, Francia, fundó la iglesia valdense en el siglo XII. Valdo renunció a sus posesiones para predicar un credo de sencillez y pobreza que condenaba los excesos papales. Fue excomulgado y sus seguidores fueron perseguidos por Roma.
Hoy en día, los valdenses están unidos a la iglesia metodista y dicen tener unos 45,000 seguidores, la mayoría en Italia, Argentina y Uruguay.
Francisco condenó los actos atroces cometidos por los cristianos en nombre de la fe a lo largo de la historia.