Canelo Álvarez, en los últimos meses, ha mejorado sustancialmente su defensa. Y hasta se puede decir que tiene “cierto dominio” de los fundamentos técnicos.Como lo explicó en la primera entrega, cuando enfrentó al estadounidense Austin Trout, el pasado 20 de abril, dejó ver su avance técnico. Y ganó relativamente fácil la pelea. Sin embargo, ante un boxeador tan capaz -y escurridizo- como Mayweather, calificado como el mejor boxeador kilo por kilo de la actualidad, el mexicano no debe medir técnica.
Me explico: Entre dos boxeadores técnicos, el mejor técnico debe dominar, salir airoso. Y Mayweather es un fino técnico y un peleador preciso en el lance de sus puños.
No desperdicia golpes. Acostumbra evadir puños a base de su probado dominio de los fundamentos del boxeo. Y ni hablar cuando se va a las cuerdas. En las cuerdas se luce colocando su guardia hacia arriba. Ahí bota los golpes lanzados por su rival. Lo que ocurra en el combate, en los primeros seis rounds, será determinante respecto al triunfo de uno de los dos contendientes.
Porque Mayweather no va a buscar a su enemigo. Lo va a esperar que vaya hacia él. Lo irá estudiando hasta encontrar el “fácil blanco”.
Por eso es que explico que Canelo Álvarez no debe inventar. Tiene, si quiere dar la “sorpresa”, que hacer una pelea agresiva desde el instante en que inicie la riña.
¿Cómo podría terminar?
¿Cómo podría terminar el combate? El resultado, a mi juicio, será por decisión. Aunque, desde luego, no debemos descartar que haya un nocaut.
¡Y por nocaut es el único camino que tiene el mexicano para salir por la ancha puerta del éxito!
Estamos todavía “algo lejos” para la llegada del 14 de septiembre por lo que podrían ocurrir acontecimientos que hasta hagan “cambiar la opinión de los expertos”.
Pero en este momento les tengo un adelantado vaticinio. Primera conclusión: Mayweather, por cualquier vía, debe salir airoso.
