¿Qué es y de dónde nace la pedagogía?

En mi primer artículo de esta columna, que generosamente publica el prestigioso periódico elCaribe, del que me siento honrado al haber sido, con apenas 13 años de edad, su primer canillita en mi pueblo natal de Salcedo, traté el tema titulado:…

En mi primer artículo de esta columna, que generosamente publica el prestigioso periódico elCaribe, del que me siento honrado al haber sido, con apenas 13 años de edad, su primer canillita en mi pueblo natal de Salcedo, traté el tema titulado: ¿Qué es y de donde nace la andragogía? Y en esta entrega, relato lo concerniente a la pedagogía, completando la explicación de dos ciencias que como la Pedagogía y la Andragogía tienen un mismo origen, pero operan sin ser contrapuestas en diferentes etapas de la vida del ser humano, la primera, en la niñez y por extensión en la adolescencia y la segunda, en los adultos jóvenes y mayores.

Como expliqué en mi artículo de referencia la antropogogía, es la ciencia madre de donde nacen la pedagogía y la andragogía; sin embargo, creo conveniente  hacer precisiones concretas sobre dicha ciencia.

Félix Adam y su aventajada hija Elena la definen como: “La ciencia y el arte de la educación integral, personalizada y permanente del hombre, según su desarrollo psicobiológico y en atención a su contexto filosófico, sociocultural, lúdico, ergológico o en situación de retiro laboral”.

En un lenguaje más pragmático y para entenderlo con más precisión, la pedagogía traza el marco conceptual del proceso “enseñanza-aprendizaje”, en un acto educativo absolutamente vertical, porque el maestro lo es todo en razón de que el infante carece de argumentos para rebatir lo que le enseña el maestro; sin embargo, la andragogía traza el marco conceptual del proceso “orientación-aprendizaje”, en un proceso educativo preponderantemente horizontal donde el facilitador (catedrático) y el participante (estudiante) interactúan en igualdad de condiciones, pues ambos en su rol de adultos poseen un caudal de experiencias que deben compartir, lo que conlleva a la participación porque lleva implícito el carácter democrático de la educación.

Lo expresado anteriormente nos lleva a afirmar que como a la educación superior asisten adultos, jóvenes y maduros, no constituye ningún invento si afirmo que la andragogía es la ciencia que necesariamente debe aplicarse en la educación universitaria.

La pedagogía está dirigida exclusivamente para infantes, niños y, por extensión, a los adolescentes.

En sentido general, la pedagogía se define como el arte de instruir y educar al niño.

Leyendo el diccionario pedagógico de Víctor García Hoz, este define la pedagogía de la manera siguiente: No hay dudas de que la pedagogía es una ciencia, puesto que se trata de un conjunto de verdades relacionadas entre sí, de tal suerte que forma un cuerpo organizado de doctrina, adquiriendo por la aplicación de métodos propios a un objeto determinado.

Resulta imposible consignar aquí la amplia y extensa concepción que hace el señor Víctor García Hoz de la Pedagogía destacando solamente el enfoque que este hace de las ciencias fundamentales y  auxiliares de la pedagogía, su historia; la pedagogía ambiental, comparada y diferencial.

Desde el siglo XVIII Rousseau estableció que la educación debería comenzar en la familia y centrarse en el niño, estimulando su deseo de aprender, formando sus principios y estableciendo lazos afectivos. Su obra clave fue el Emilio, publicado en 1762, constituyendo un nuevo concepto de la educación basado en la espontaneidad, e insistió en que los alumnos deben ser tratados como niños y no como adultos en miniatura, atendiendo a su personalidad individual.
Pestalozzi propuso y ensayó un método para la enseñanza pedagógica.

Humboldt, considerado el padre de la pedagogía, estructuró el campo pedagógico a partir de sus trabajos, fue un excelente colaborador con la génesis de la psicología infantil.

Fiobel consideró vital dar a los maestros una adecuada formación pedagógica acorde con la enseñanza que de ellos se aspira.

María Montessori, autora del método pedagógico que lleva su nombre, está fundamentado en la completa libertad del niño para desarrollar su propia iniciativa, teniendo el maestro el exclusivo papel de observador y coordinador del proceso educativo al reforzar la autoestima de los medios educativos a través de los juegos y el trabajo manual.

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