DAMASCO, Siria (AP) — Al menos 12 civiles han muerto, incluidos tres niños, debido al cañoneo de combatientes rebeldes a un sector de la ciudad en poder del gobierno, informó la televisión estatal siria el sábado.
La televisión informó que el cañoneo, que mató a ocho miembros de una familia, también dejó 45 heridos. La agencia noticiosa estatal informó que de acuerdo con un funcionario policial no identificado tres de los muertos eran niños. El funcionario dijo que los proyectiles cayeron en una zona residencial, donde dañaron viviendas, tiendas y automóviles.
El Observatorio Sirio por los Derechos Humanos, con sede en Gran Bretaña, dijo que los ataques rebeldes dejaron cinco muertos. El Observatorio, que cuenta con una red de activistas en el terreno, dijo que la cifra de muertos probablemente aumentará porque varios heridos se encontraban en estado crítico.
No fue posible conciliar las cifras de bajas, pero estas discrepancias son frecuentes inmediatamente después de los ataques.
Alepo, el ex centro comercial del país, se convirtió en un frente crucial de la guerra civil a partir de una ofensiva rebelde en julio de 2012. Los rebeldes de diversas facciones y el gobierno controlan distintos sectores urbanos.
La zona tiene valor estratégico debido a su proximidad con la frontera turca.
En el pasado los rebeldes sirios han cañoneado zonas residenciales en poder del gobierno, en las que han muerto cientos de personas. Aviones del gobierno han lanzado barriles llenos de explosivos en distritos rebeldes de Alepo y otras ciudades, con un saldo de miles de muertos.
El jueves, la prensa estatal dijo que los «terroristas» cañonearon un distrito en poder del gobierno y mataron al menos a siete civiles.
