Quieren convertir en estado de persecución contra determinadas sectas religiosas cualquier idea asociada a la disminución de ruidos. Existen normas sobre emisión de ruidos que dañen el medio ambiente. Pero las autoridades no cumplen sus roles y no imponen orden. Tampoco los ciudadanos víctimas de los ruidosos agotan los recursos previstos en las normas y terminan acostumbrándose. Los aceptan como normales. Pero la verdad debe ser dicha: hay determinadas denominaciones protestantes, especialmente los pentecostales, que son brutalmente ruidosos, y lo hacen como si gozasen de una licencia concedida por la gracia de Dios. Son unos abusadores. Por amor a Dios, deben pensar en el prójimo, en los vecinos, en la paz de los hogares.
Son ruidosos
Quieren convertir en estado de persecución contra determinadas sectas religiosas cualquier idea asociada a la disminución de ruidos. Existen normas sobre emisión de ruidos que dañen el medio ambiente. Pero las autoridades no cumplen sus roles…