La tecnología y los adultos mayores

“Envejecer no significa perder la capacidad de adaptarse al cambio ni querer estar anclado en el pasado”. Todo lo contrario. Gracias al Internet hay un mundo de opciones para los adultos mayores en el que es posible crecer, aprender y ampliar…

“Envejecer no significa perder la capacidad de adaptarse al cambio ni querer estar anclado en el pasado”. Todo lo contrario. Gracias al Internet hay un mundo de opciones para los adultos mayores en el que es posible crecer, aprender y ampliar los horizontes día tras día. Y no menos importante es el intercambio en línea con las nuevas generaciones que posibilita el traspaso de los conocimientos y las experiencias que sólo otorgan los años.

Así conceptualiza el doctor Rafael Bello Díaz un tema que viene a colación desde que la República Dominicana declarara el primero de octubre como Día Internacional de las Personas Mayores. Convertir la conmemoración en beneficios tangibles para los de la tercera edad no es pequeño reto en un país donde el 69 por ciento de la población está sumida en la pobreza y su acceso a los bienes y servicios es casi nulo o precario.

Para el porcentaje restante las posibilidades son interesantes. El tema lo abordamos con Bello Díaz quien es director del Campus virtual de la Universidad Católica de Santo Domingo (UCSD).

l ¿Cómo incide en la vida de los
adultos mayores el auge de las nuevas tecnologías?
l Para las personas adultas, por ejemplo, se alarga la vida laboral, puede continuar desempeñándose en su disciplina desde el teletrabajo, como los docentes en los Cursos Masivos en Línea y Abiertos (MOOC) que se presentan desde las redes. O desde la educación a distancia, tenemos excelentes docentes ya adultos mayores que pueden ofrecer cursos y cátedras a distancia, y participar en foros.

Si se les hace más difícil a los adultos mayores viajar a distintos países y todo el compromiso que esto conlleva, pueden mediante las videoconferencias realizar reuniones, juntas, debates o elementos de supervisión de empresas multinacionales, por ejemplo. Ya con la tecnología de telepresencia que cuentan muchas empresas es posible tener una reunión cara a cara, que no dista nada de una reunión presencial, en estos momentos. Además, son utilizados como consultores, por su vasta experiencia mediante las TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación)
Además, incide de varias maneras:

Facilitando la integración, comunicación e información entre los mayores; mejorando la relación intergeneracional: en la actualidad, la persona mayor, al dejar su actividad laboral, deja también gran parte de su valiosa aportación a la sociedad.
Afortunadamente, comienza a emerger una nueva filosofía de educación de los mayores en la que se intenta que en una sociedad de objetivos productivos, cuando el anciano sale del ámbito laboral, no salga también de la consideración social, puesto que se desaprovecharía un cúmulo de conocimientos y sabiduría. Promoviendo el principio de solidaridad entre generaciones, fomentar el voluntariado de las personas mayores hacia los jóvenes a la hora de transmitirles sus conocimientos y experiencias profesionales y de otro tipo. Mejorando la autoestima y la aportación creativa.

l ¿Cuáles son los pros y los contras de la inserción de los adultos mayores al mundo de las nuevas tecnologías?

l Hay tantos pros como contras, pero los contras se pueden salvar y reajustar.
En los pros, mejora la autoestima de los adultos mayores, disminuye los momentos de depresión, y de aislamiento y soledad, mantiene una comunicación fluida y permanente con sus amigos y relacionados y antiguos compañeros de trabajo, mediante fotos, WhatsApp, chats, redes sociales.

En los contras, cada vez son más sofisticadas las tecnologías de los teléfonos inteligentes, y de las tabletas, computadoras y sus navegadores, y son más complejos sus aprendizajes.

La tecnología informática, en especial las computadoras y el Internet, es apreciada por algunas personas mayores por su amplio alcance y comodidad. Las personas mayores dicen que el Internet es una buena manera para mantenerse en contacto con familiares que viven lejos, a veces en otros países. No obstante, muchas personas mayores experimentan una sensación de exclusión por no usar computadoras o Internet.

La conversión de servicios directos y documentación a tecnología de computadora aumenta esta sensación de exclusión.

Partiendo del principio que no tiene por qué haber usos diferenciados de las nuevas tecnologías en función de determinada banda de edad de los usuarios, sí podemos señalar los siguientes como los que más posibilidades ofrece: medio de interacción social, cultura, ocio, ayuda, actividad laboral y formación. Una de las posibilidades más significativas que las nuevas tecnologías juegan para las personas mayores, es la ayuda que les puedan prestar para superar uno de los mayores miedos que tienen estas personas: la soledad; tanto individual como en lo que respecta al aislamiento de sus familiares. De esta forma se aumenta la interacción en el ciberespacio, facilitándose con ello su autonomía personal y social.

l ¿Cómo manejar la desigualdad que se genera en la utilidad, en la complejidad de su uso, en los altos costos, entre los jóvenes y los adultos mayores?
l Indiscutiblemente que las TIC cada día son más costosas a medida que avanza la tecnología misma, pero los adultos mayores no necesitan la computadora más avanzada sino un equipo estándar que permita la comunicación, la lectura de periódicos, libros, fotos de la familia, videos de interés y páginas web que puedan aprovechar.

En muchas ocasiones las familias adquieren nueva tecnología, y dedican los equipos viejos a adecuarlos para los abuelos, por ejemplo, y lo sigan utilizando. Los días del Padre y Madre que son además de los abuelos, los regalos consisten en tecnologías.

La penetración de Internet en los mayores tiene un ritmo más lento que en otros sectores de la población, aunque cada vez más personas mayores se van desenvolviendo en un mundo en línea. A pesar de ello, nuestro país aún se encuentra por detrás de muchos países en relación a la frecuencia con la que los mayores de 65 años se conectan a Internet con regularidad.

Esto nos hace también reflexionar y preguntarnos:
¿De qué manera las TIC pueden contribuir al aumento de la calidad de vida de las personas mayores?

El acceso y uso de las TIC puede suponer un incremento en la autonomía de las personas mayores afectadas por algunos tipos de patologías o riesgo para la salud.

En este sentido, las TIC, más que unos instrumentos preventivos se convierten en un instrumento compensador que revierte el efecto de ciertas deficiencias. Un ejemplo típico en este sentido son las TIC que permiten avisar al centro de salud más próximo en caso de urgencia.

l ¿Ha venido esta corriente a acercar generaciones o a distanciarlas? Como es el caso de los padres y los hijos.

l Esto está en debate, ya que siempre han existido generaciones de hijos que no se comunican con la frecuencia que debiera ser con sus padres y también generaciones de hijos que su comunicación siempre es muy buena con sus padres y madres, es parte de la comunicación familiar y el estilo de vida de estas familias, pero las generaciones que se comunican tienen en las TIC un contacto permanente, desde su trabajo si los padres están en casa, desde sus viajes al exterior si son dados a los viajes, etc. etc. Por lo que no podemos culpar a las TIC como el elemento distanciador de las personas y de las familias, necesariamente.

El uso de la nueva tecnología ni es obligatorio ni puede ser forzado en absoluto. Las personas mayores pueden encontrar ya hoy mucha información relevante y posibilidades de comunicación a través de Internet. Sin embargo, el reto fundamental que dará la medida de la integración de la persona mayor en la sociedad de la información es su habilitación no sólo como consumidores de recursos en línea, sino como creadores de estos recursos o asesores en el proceso de su creación. Las nuevas herramientas tecnológicas proporcionan una infinidad de beneficios. Uno de los más relevantes es su inmensa capacidad comunicativa y el acceso a la información a través de Internet.

l ¿Cree que estas tecnologías modernas en el ámbito profesional y laboral beneficia a los adultos mayores o los saca del mercado?
l Un elemento de suma importancia en la tecnología es que facilita la actualización y aprendizaje de los adultos y esto hace que, al llegar a ser adultos mayores, tengan una clara visión y actualización de su disciplina y trabajo, de tal manera que siguen siendo empleados como consultores, y otras formas para poder aprovechar sus experiencias y sus nuevas vivencias mediante los cursos en línea que puedan haber aprovechado.

Implicarse en el aprendizaje de nuevas habilidades y en el manejo de un instrumento tecnológico sin duda es un ejercicio que tiene beneficios sobre el funcionamiento cognitivo general de las personas mayores, especialmente cuando estamos hablando de un tipo de tecnologías que, a diferencia de otras (como por ejemplo la radio o la televisión) requieren de una participación activa del usuario: es la persona la que ha de buscar, ordenar avanzar en su relación con aparatos eminentemente interactivos.

La resistencia de los mayores al uso de la tecnología no es infundada, ya que en base a los prejuicios existentes frente a la vejez se ha construido una barrera entre las personas mayores y las tecnologías, lo que no es responsabilidad única de ellos sino de la sociedad en su conjunto: El discurso asocia las nuevas tecnologías casi exclusivamente con la juventud. Es claro que los mayores no son “nativos digitales” pero es posible promover, por ejemplo, contenido atractivo para ellos.

l ¿Qué futuro ve en los adultos mayores respecto a esta corriente?
l Las App ayudan mucho a las personas, y es para los adultos mayores un atajo importante y relevante, hay personas de la vida religiosa que utilizan desde el toque de un dedo el acceso a sus fuentes religiosas y bíblicas, por ejemplo, a sus noticias, a su música favorita en YouTube, a sus idiomas preferidos, a sus deportes y actividades de juegos olímpicos, etc.

Envejecer no significa perder la capacidad de adaptarse al cambio ni querer estar anclado en el pasado. Muy al contrario, la mayoría de personas mayores desean seguir creciendo y aprendiendo cosas cada día, por ello pueden desear disfrutar de los nuevos horizontes que abre el uso cotidiano de la tecnología.

La edad es uno de los factores más importantes en esta división de la población entre los que tienen y no tienen acceso a las TIC, conocida como la brecha digital. Así, mientras otros factores, como el género o la raza tienden perder importancia en la determinación de porcentajes de personas conectadas, la edad parece mantenerse todavía como un factor muy importante. l

Posted in Sin categoría

Más de

Más leídas de

Las Más leídas