Tiger Woods tendrá que esperar un día más para intentar reconquistar el puesto número uno del mundo.
Una fuerte tormenta interrumpió la ronda final en el torneo de Bay Hill de la PGA ayer, luego que Woods y Rickie Fowler habían jugado un par de hoyos.
No hubo reportes inmediatos de algún daño en Bay Hill. Los funcionarios del torneo, voluntarios y los medios de comunicación se guarecían en las esquinas de la casa club hasta que la alerta de tornado expiró.
Woods consiguió un birdie en el segundo hoyo y tenía ventaja de tres golpes sobre Fowler, Keegan Bradley, Justin Rose y John Huh. Woods intenta ganar Bay Hill por octava ocasión para empatar un récord de la PGA. Una victoria pondría a Woods en la cima del escalafón mundial por primera ocasión desde la última semana de octubre de 2010.
