Una mirada distinta, así es la de Luis Hidalgo

En nuestra labor de dar a conocer la escena local artística de nuestro país, nos comunicamos con el artista Luis Hidalgo, quien nos comentó…

En nuestra labor de dar a conocer la escena local artística de nuestro país, nos comunicamos con el artista Luis Hidalgo, quien nos comentó en una entrevista exclusiva para Bureo, acerca de su pasión y vivencias a lo largo de su carrera.

Ilustración, moda y fotografía son los ejes que sustentan la carrera profesional de este artista por vocación.

¿Qué no toleras del mundo del arte? Lo que tampoco tolero del mundo «real»: la gente egocéntrica y poco humilde. El artista como ente creador debe ser accesible.  Detesto cuando la gente pisotea el trabajo de otro para poder brillar.  El artista trabaja, crea; no «marea» con poses y actitudes falsas.  Al final tu obra es la que habla por ti. 

Muchos proclaman en estos tiempos la muerte de la pintura…  No creo. Entiendo que quizás ha dado paso a estilos y técnicas diferentes, reinventándose.  Ya no sólo se pinta sobre lienzos, ni tampoco se usa una sola técnica en una misma obra.  La pintura, en su esencia, siempre será importante, al igual que el dibujo.

¿Te sientes exitoso? Si por «exitoso» entendemos el estar haciendo algo por lo que siento una verdadera pasión, sí. No negaré que es bueno cuando la gente, aún sin conocerte en persona conoce tu trabajo.  Pero entiendo que el éxito es algo tan relativo que prefiero medirlo en términos personales.

El reconocido artista Damien Hirst manifestó en una oportunidad que no hay nada más aburrido que un artista que quiere que lo tomen en serio, ¿Qué crees?  Entiendo que los artistas somos seres dotados de una sensibilidad muy especial, y que el arte, aparte de comunicar y narrar historias debe ante todo provocar una  reacción en quién lo ve, sea  ésta buena o mala.  Hay que creerse el papel de artista, sin dejar de ser uno mismo; y tomárselo en serio.

¿Cómo has tomado las críticas hacia tu obra? Soy muy abierto a las críticas, siempre y cuando tengan fundamento. Con mi primera individual, Disturbia (2008), entendí que mucha gente no considera el trabajo digital como arte, quizás por la falsa creencia de que la computadora es quién lo hace todo. En cuanto al discurso, mucha gente me acusa de ser oscuro e irónico en mis planteamientos. Eso sí es súper cierto. Me gusta replantear las cosas bajo otra luz, y susurrar mensajes en mis obras utilizando símbolos y metáforas visuales.

¿Qué importancia tiene para ti la Bienal de Nacional de Artes Visuales?  Es un evento súper importante para el arte dominicano.  Es como un termómetro que mide no sólo lo que está pasando con los procesos creativos de los artistas, sino también una especie de reseña de nuestra sociedad vista a través de sensibilidades distintas. 

¿Y los marchantes? En definitiva el arte es un negocio, y aunque los artistas poco a poco estamos informándonos y estudiando para entender este medio, al final seguimos siendo artistas. Un buen marchante no sólo conoce tu trabajo, también entiende el mercado y sabe qué trabajo puede venderse y a qué cliente. Son como los directores de los orfelinatos de las películas…Y como todos, hay algunos buenos y algunos malos.

¿Qué hay que hacer para vender cuadros?  Yo diría que mantenerse firme en su discurso.  Yo no trabajo para vender. Por eso cuando sucede, la satisfacción es enorme. Las redes sociales y mis blogs me han dado una perspectiva de lo que  a la gente le gusta, lo que les llama y lo que pasa simplemente desapercibido.

Disciplinado, ¿crees que aquí radica realmente el éxito de un artista?     100 %.  El arte es disciplina.  Es retarse cada día a experimentar cosas nuevas y permanecer sensible a todo lo que nos rodea. Sin disciplina, no hay inspiración. La disciplina va de la mano con el talento, que a su vez es empujado por la pasión.  El día que ya no sienta pasión por lo que hago, el día que crea que no tengo más retos que enfrentar, me pongo a hacer otra cosa.  Pero no creo que eso pase.

Posted in Sin categoría

Más de

Más leídas de

Las Más leídas