Edinson Vólquez quiere sacarle copia a los pasos de su amigo Francisco Liriano y a la tremenda temporada que tuvo en 2013.
Lo primero fue firmar con los Piratas por un año y cinco millones de dólares. Ahora que es compañero de Liriano, su tarea se inicia todos los días a las 6:30 de la mañana (hora del este de los Estados Unidos, 7:30 de República Dominicana) en el entrenamiento primaveral de Pittsburgh.
“Tengo muchas cosas que aprender de Liriano”, dijo Vólquez a elCaribe por la vía telefónica desde Bradenton, Florida, donde entrenan los Bucaneros. “Su madurez es increíble, la forma en que se maneja, como asume su trabajo, la concentración, siento que todo eso será importante para mí”, agregó.
“Liriano tuvo mucho que ver con mi firma con los Piratas. Somos amigos desde pequeñas ligas y todo el mundo sabe el tremendo año que tuvo en la pasada campaña. Espero hacer lo mismo, Dios mediante”, señaló Edinson.
El zurdo Liriano tuvo registro en 2013 de 16-8 con un promedio de carreras limpias de 3.02, estadísticas que le confieren su mejor año en las Grandes Ligas. Su carrera comenzó en 2005 con los Mellizos de Minnesota.
Edinson, de su lado, es un derecho de muchas condiciones que aún no ha tenido un período dominante en las Grandes Ligas, a pesar de su tremendo repertorio. Su mejor año fue en 2008 con Cincinnati, cuando tuvo registro de 17-6 con un promedio de carreras limpias de 3.21. Al igual que Liriano, debutó en las Mayores en 2005 con Texas.
“Siento que este es mi año”, dijo. “Así lo siento. Estoy en excelentes condiciones físicas y me siento motivado a lograr ese propósito con Dios por delante”, indicó.
Ayuda especial
Cuando Liriano motivaba a Vólquez para que pactara con los Bucaneros, todo se centraba en lo mucho que el entrenador de pitcheo de los Piratas podía hacer por él. Edinson se ha dado cuenta del gran interés por ayudarle.
“Estoy aquí desde el pasado día 13. Ya he realizado varias sesiones de bullpen (soltar el brazo) y me siento bien. Me han hecho varios señalamientos y la meta es trabajar fuerte para mantener la mecánica durante la temporada”, comentó el serpentinero de 30 años, quien llegó al entrenamiento con siete libras menos.
“Trabajé en mi físico y vine en las mejores condiciones en mucho tiempo”, agregó Vólquez. El coach de pitcheo del conjunto, Ray Searage, le dijo al diario Pittsburgh Post-Gazzette que el plan consiste en ayudar a la caída de Vólquez luego de cada lanzamiento. “La idea es que su cabeza se mantenga en la línea del objetivo y que caiga firme en su pie izquierdo”, explicó Searage al rotativo.
El derecho tuvo foja la pasada campaña de 9-12 con un promedio de carreras limpias de 5.71 para San Diego y los Dodgers. De por vida tiene registro de 53-52 con un promedio de carreras limpias de 4.75. Edinson, quien llegó ayer al complejo de Pittsburgh con Wandy Rodríguez como su chofer, sabe que la meta del equipo es regresar a la postemporada. En 2013, rompieron una cadena de 21 años (desde 1992) sin probar de las mieles del playoff.
“Se espera mucho de mí y yo también tengo mis metas altas”, dijo. l
