La Megaparranda Navideña es como un central azucarero. La alta chimenea en vez de humo emite música en vivo. Produce emociones.
Con temperatura muy fria en Constanza, Sergio Vargas subió la temperatura a puro merengues, como siempre gracia y timbre i confundidle de voz. Mientras Steffany Constanza deleitó en su regreso a los escenarios en su natal ciudad, con su talento y carisma. Algunos le llaman “el nuevo corazón del merengue”.
El Rubio del Acordeón conecta de inmediato con la multitud. Desde el primer al último acorde bailan sus éxitos.
Crazy Design, por igual.
Sigue siendo la Megaparranda Navideña el espectáculo más impresionante y maravilloso de la diversión navideña.
Mientras tanto, en Jarabacoa, la celebración con la multitud al ritmo de merengue, bachata y merengue típico.
En un ambiente de fiesta, alegría, felicidad y diversión familiar, las multitudes disfrutaron de una suculenta cena navideña y un banquete musical.
La noche comenzó con la banda local de Los clásicos de Osvaldo, que animó la Megaparranda Navideña 2024 con un baño de gente dispuesta a divertirse.
Luego arribó Fefita La Grande, en una presentación donde desplegó todo su carisma y sabiduría de tantos años sobre los escenarios. El público le rindió un estruendoso aplauso de admiración y respeto. Ahora mismo en los cines se pasa la película sobre su vida “La Grande”, protagonizada por Lumi Lizardo.
Cuando dieron las 11:30 de la noche, El Chaval de la Bachata logró crear un coro colectivo que nunca paró de acompañarlo en cada tema que interpretó.
La Megaparranda Navideña está llenando el país de alegría.
