Originalmente es un filme de cuatro horas, dividido en dos volúmenes, siendo este el primero en ser emitido. En sí, y en ambos “volúmenes” nada es gratuito y se concentra en mostrar las interioridades de una mujer vencida, pero que al mismo tiempo no se arrepiente de nada de lo que ha hecho motivada por una condición conocida como ninfomanía –definido como un deseo sexual desmedido en la mujer–. Las genitales de ambos sexos no son ocultadas, más bien son el motor físico-visual de la trama en actos en los que una mujer, como personaje central, procura sexo compulsivamente, no por orgasmo sino como puerta de escape a su manifiesta manía descontrolada. Pero el tema que vemos con fuerza en la estructura de la trama es lo relativo a diferenciar antisemitismo de antisionismo. El filme inicia y se desarrolla con la manifiesta y extraña agonía de una mujer tendida en una cama ante un hombre a quien confiesa una “larga historia” que tiene como resultado un auto desprecio; las acciones del personaje revelan apetitos sombríos del ser humano. Diálogos bien proyectados con parábolas, citaciones metafísicas e iconografías apologéticas, nos muestran la insatisfacción del ser humano. En ese punto se acerca a las ideas de Freud en su ensayo “El malestar de la cultura” donde trata el sentimiento de culpa y la autodestrucción. Lars Von Trier, guionista y director, probablemente logra con este filme un cierre verosímil para lo que se conoce como su trilogía de la depresión (Anticristo, Melancolía). Mediante tácticas narrativas conservadoras, si bien rehúye banalizar la historia aunque bordea con personajes y tomas eróticas las escenas de sexo explícito. Para su análisis emocional se vale de recursos y diseños gráficos, las matemáticas, frases filosóficas y de humos, en una táctica del uso de hipertextos encajados con perfección en cada secuencia y escena. Banda sonora repleta de músicas de Bach y rock rondando entre el arte masificado y lo erudito. Buena actuación y bastante creíble de cada personaje. Este “volumen 1” está dividido en cinco episodios o capítulos, aunque ambas partes (la l y la ll) suman 8. Me atrevo a afirmar que este filme es un ensayo cinematográfico sobre el arte de narrar; se vale de un tema sugestivo con un título atrayente sobre sexo para experimentar valiéndose de variables formales como son los “capítulos”. En Netflix con ese título. Nota: continuaremos en la próxima crítica Nymphomaniac, volumen ll.
HHHH Género: Drama erótico./ Duración: 117 minutos.
