A finales del siglo XV, cuando los conquistadores decidieron introducir la caña de azúcar al Caribe, quizás no imaginaron que en un futuro lejano esta planta se convertiría en sinónimo de identidad para la región.
Esto se evidencia en la relevancia que han alcanzado sus productos derivados, como el ron, hoy día una bebida de clase mundial.
El experto Otto Flores, director global de los embajadores de Ron Barceló y host de la plataforma Barceló Rum Academy, explica que la etimología de la palabra “ron” proviene del concepto “rumbullion”, una reducción que suena similar tanto en francés como en inglés y que en aquel tiempo se usaba como sinónimo de “un gran tumulto”.
«El ron es el resultado de la colaboración de muchas manos y nacionalidades. Las potencias europeas que llegaron al Nuevo Mundo en los años 1500 se establecieron en regiones específicas y comenzaron a trabajar la caña de azúcar con su propio conocimiento. Así, el ron empezó a producirse de manera particular en cada cultura, incorporando sus técnicas y saberes. De este intercambio nacieron las escuelas españolas, francesas e inglesas, las principales influencias en la producción de ron en el Caribe”, reseña Flores.
La casa española producía rones a partir de melaza, creando rones ligeros y destilados en alambique. Utilizando el jugo de caña de azúcar, la francesa producía rones con notas herbales y frutales, cercanas a su materia prima. La casa inglesa también usaba melaza pero fabricaba rones más robustos, con aromas y sabores más pronunciados.
Hoy en día, el ron ha evolucionado y diversificado más allá de estas tres grandes escuelas, y no solo se clasifica según su materia prima y proceso de producción. La innovación en la producción de ron ha llevado a la creación de una variedad infinita de sabores y estilos que satisfacen a los paladares más exigentes. Por ejemplo, la colección Rare Blends de Ron Barceló, lanzada en 2022, celebra la exploración de nuevas sensaciones con creaciones como el Barceló Imperial Porto Cask, Marple Cask y Mizunara Cask, cada uno envejecido en barricas hechas de madera única que aportan sabores extraordinarios. Mientras tanto, el Barceló Imperial se ha consolidado como el ron dominicano más laureado del mundo.
Barcelo Rum Academy está disponible a través del canal de YouTube de Ron Barceló. Esta es la primera plataforma de su tipo en la República Dominicana y forma parte de un programa educativo integral impulsado por la marca, que también incluye becas y apoyo a competiciones de bartenders.
Trascendiendo el paladar
Más que una bebida, el ron tiene el poder de evocar la nostalgia y de conectar a las personas con la historia y la cultura del Caribe. Cada botella es un viaje hacia la época de los piratas y corsarios, a las celebraciones que aún hoy día tienen lugar en nuestras tierras. El ron simboliza la resistencia y la creatividad de las culturas caribeñas, que supieron transformar un cultivo impuesto en una bebida deliciosa, y hoy por hoy, emblemática de su identidad. El ron se convierte en un símbolo de historia compartida, de mezcla de influencias y de la capacidad de nuestras comunidades para crear algo único y valioso.
Los orígenes
En 1493, durante su segundo viaje al Nuevo Mundo, Cristóbal Colón introdujo la caña de azúcar en el Caribe. Aunque la caña de azúcar es la madre de todos los rones, su origen no está en el Caribe, sino en Asia. Fue llevada al sur de Europa por los árabes, estableciéndose específicamente en la zona sur de España. Lo que conocemos como ron hoy en día comenzó a tomar forma en los años 1660 en Jamaica, donde el proceso de destilación perfeccionado por los holandeses dio lugar a la bebida moderna. Al principio, el ron no era tan refinado ni elegante, pero su envejecimiento en barricas creó mezclas únicas que ahora disfrutamos.