Somos sociedad muy politizada, bien sabemos, pero también hay que guardar las formas. Por ejemplo, en cuanto a la emergencia en el este y noreste del país, zonas impactadas por el huracán Fiona el 19 de septiembre. Fue la actitud, afortunada, del presidente Luis Abinader cuando dijo: “Las ayudas del gobierno llegarán a todo el que las necesite sin importar banderías políticas”. Entretanto, teníamos a funcionarios en grotesca politización de la coyuntura. “…A pesar de la crisis, con su intensidad y sinceridad Abinader tiene su reelección asegurada” (ministro de Industria y Comercio). “Juntos estamos superando en tiempo récord los retos que nos dejó el huracán Fiona” (ministro Administrativo de la Presidencia). Ciertos entusiasmos en determinadas circunstancias perjudican.