La madre naturaleza mostró su satisfacción con una clásica neblina de los amaneceres de Constanza, que matizó el notable éxito con que se realizó el viernes, sábado y domingo pasados: 6, 7 y 8 de este mes de setiembre, el primer festival de ensaladas del país, Constanza Salad Fest 2019. El restaurante Moncarlo, que sirvió de sede en su estacionamiento a la materialización del evento, vistió de gala sus instalaciones como anfitrión, contribuyendo de manera magistral en la proyección de Constanza como cuna vegetalera y aportante estelar a la alimentación en los polos turísticos y promotora del turismo interno, enfatizando el “gastroturismo”. El múltiple colorido de las hermosas y diversas especies de vegetales matizaron tres intensos días de febril actividad de un dinámico y eficiente grupo, que dio vida a la larga planificación y gestiones. Los organizadores dieron atractivos marcos a la natural belleza de los vegetales que manos constanceras son capaces de cultivar. En un mayúsculo esfuerzo y particular inversión económica, se promueve desde el sector privado, la colocación de ese laborioso enclave de producción agrícola, en el mapa turístico gastronómico dominicano. El peculiar valle de Constanza es proyectado por los meritorios promotores de esta interesante iniciativa, reforzando su imagen de espacio de temperaturas y ecología de zona ajena al clima tropical típico de nuestra región caribeña. Constanza es un paraíso de personalidad propia, hombres recios y laboriosos y mujeres de particular belleza y encantos, de solidaria personalidad de empuje y atractiva y alegre emotividad. Iniciativas de esta clase, precisan de un certero apoyo estatal y la entusiasta colaboración y participación municipal, para reforzar una identidad y una marca-región, que vaya más allá que atractivos naturales de los que Constanza goza. La tierra de la gesta inmortal del 14 de junio del 1959, queda en deuda con Carlucho Matías Quezada, ideólogo y promotor de la idea del Salad Fest, propietario del Moderno restaurante Moncarlo, que merece el más sentido reconocimiento de todos los dolientes de Constanza, por la efectiva promoción del municipio y por destacar la capacidad productiva de sus tierras y de sus hombres. Luminosa página escrita con sacrificios y esfuerzos infinitos, que ha sabido sobrepasar obstáculos, sortear dificultades, compensar escasez de apoyos y tímidas participaciones y aún así escribir experiencias que mejorarán sensiblemente el desempeño de las próximas versiones de este festival de ensaladas. Agradecidos han de estar los organizadores, de auspiciadores y el numeroso público que creyeron y apostaron al éxito del Constanza Salad Fest, abriendo un camino a la creatividad criolla. Felicitaciones a sus creadores, promotores, auspiciadores, público en general y el amplio y laborioso personal de apoyo. Mi profundo reconocimiento, como admirador externo, de los que se atreven.

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