El ministro de Agricultura Limber Cruz repuso 37 técnicos que fueron “desvinculados” recientemente de esa institución. La palabra desvinculación es la utilizada por los actuales gobernantes para hablar de las cancelaciones. Esta decisión fue producto de un acuerdo con la Asociación Nacional de Profesionales Agropecuarios (ANPA), que afortunadamente sigue viva. Pero ¡ay! de los pobres servidores del ministerio de Educación, donde ha pasado una aplanadora con el apoyo de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP), que nada le importa los empleados administrativos. Los más de 40 mil cancelados en Educación no tienen defensores. Eran “cuadros peledeístas” que debían ser “desvinculados”. Total, serán sustituidos, y con derecho, por perremeístas que se fajaron en la campaña.
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