La justicia tardía equivale a justicia denegada. Lo que no debe ser, aquí es regla. Los inculpados y sus abogados se burlan de los procedimientos y los jueces acogen sus pedimentos hasta el infinito. Casos sobran, desde Santiago hasta la capital, pasando por La Vega y Bonao. El asesinato del periodista Blas Olivo, el 12 de abril de 2015, no termina de conocerse. De nuevo aplazado porque los imputados no presentaron abogados. Un nuevo plazo, 24 de mayo. Si los parientes de las víctimas no se empoderan, adiós proceso. Mediante “fórmulas mágicas”, los criminales recuperan la libertad. El olvido social y la justicia mal administrada se combinan con la corrupción que daña todo.
Justicia denegada
La justicia tardía equivale a justicia denegada. Lo que no debe ser, aquí es regla. Los inculpados y sus abogados se burlan de los procedimientos y los jueces acogen sus pedimentos hasta el infinito. Casos sobran, desde Santiago hasta la capital,…