El canciller Miguel Vargas viajó a Nueva York a un almuerzo que el secretario de la ONU António Guterres, ofreció en apoyo a la presidencia temporal de República Dominicana en el Consejo de Seguridad. Habló ante los miembros del Consejo, y según la nota de la Cancillería, resulta incomprensible, después de la resolución de la OEA contra Nicolás Maduro: una de las prioridades de República Dominicana es “evitar que la aprobación de resoluciones para atajar amenazas apremiantes, siga asumiendo la forma de una carrera de obstáculos”. Y que RD “tejerá consensos con la paciencia, la creatividad y la dedicación que sean necesarios”. Mencionó a Siria, Yemen, Somalia, el Congo, pero nada de Venezuela. No se entiende.

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