Corpus Christi
Corpus Christi

La celebración de Corpus Christi tiene lugar en el calendario litúrgico de la Iglesia católica cuando se cumplen sesenta días del domingo de resurrección, de manera que nunca cae en una fecha fija, aunque siempre es un día jueves, y por eso es que este año se celebra el 19 de junio.

Su finalidad es la proclamación de la fe de los creyentes en el cuerpo de Cristo, que está presente en la Eucaristía. Según la tradición cristiana, se originó en 1263 cuando, mientras se celebraba una misa en la ciudad de Bolsena, Italia, en el momento en que el sacerdote partió la hostia brotó sangre.

La Iglesia católica celebra ese día procesiones en todas las parroquias, misas solemnes en las catedrales con asistencia de autoridades y comunitarios, porque se trata de una fiesta religiosa importante para la feligresía en general.

Cada parroquia organiza sus ceremonias a diferentes horas, la afluencia de los fieles a los templos suele ser mayor y jamás se han registrado inconvenientes de ninguna clase porque la República Dominicana es un país donde la libertad de cultos está garantizada por la Constitución y todas las confesiones religiosas que están instaladas en el país conviven en paz y en un clima de tolerancia.

Como siempre, ciertos “fieles” asisten a las iglesias a mostrarse piadosos para que todo el mundo los vea, parecidos a los que el mismo Jesucristo señaló en sus invectivas cuando dijo: “Aman las celebraciones en las sinagogas y las largas salutaciones en las plazas” pero el resto del año su conducta y su actitud hacia el prójimo siguen siendo tan negativas y egoístas como siempre.

Felizmente, los buenos católicos, gente que se preocupa por los demás, que dedica su tiempo libre a ayudar en asociaciones sin fines de lucro o a apoyar causas que benefician a los enfermos y a los necesitados, son mayoría en este país, gente que lejos de las cámaras aporta su granito de arena por una sociedad mejor.

De ahí que, en esta magna festividad católica, hacemos votos para que se hagan realidad los deseos de quienes oran por el fin de las guerras, por la salud de los enfermos, por la reducción del hambre y por el bienestar general de la humanidad.

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