Si en algún momento estuviste indocumentado en Estados Unidos y ahora estás tramitando una visa o residencia a través de una entrevista consular, es fundamental prepararte adecuadamente. Un paso en falso puede costarte una negación, incluso si calificas para un perdón migratorio.

Primero, debes entender que haber permanecido en EE.UU. sin estatus legal por más de 180 días —o más de un año— activa penalidades de 3 o 10 años de inadmisibilidad. Por eso, muchas personas necesitan un perdón consular (I-601A) antes de salir del país para asistir a la entrevista.

Una vez tengas tu perdón aprobado, la entrevista consular es la última etapa, pero también una de las más delicadas. El oficial puede cuestionarte sobre:

• El tiempo que estuviste en EE.UU.
• Por qué entraste sin permiso o te quedaste más tiempo del autorizado.
• Tus lazos familiares y económicos con el país.

Además, si viajaste con documentos falsos, usaste otra identidad o diste una nacionalidad distinta a la tuya (por ejemplo, decir que eras mexicano para facilitar una deportación), o si entraste al país con un menor, incluso siendo su padre o madre, podrías enfrentar una acusación de “child smuggling” (tráfico de menores).

Estos factores pueden requerir un perdón adicional, que solo puede solicitarse después de la entrevista. Esto obliga a muchas personas a quedarse fuera de EE.UU. durante meses o incluso más, esperando la decisión.

Si estás en esta situación, consúltame antes de salir del país. Una estrategia clara puede marcar la diferencia entre una reunificación pronta y una separación prolongada.

Posted in Migración sin fronteras, Opiniones

Más de opiniones

Más leídas de opiniones

Las Más leídas