Para muchos observadores, se ha hecho evidente una valiosa coincidencia entre la dinámica de gestión del gobierno municipal de Santo Domingo Este y el modelo de gobernanza que anhela la sociedad dominicana a nivel nacional.
Este municipio, Costa del Faro, SDE, se ha convertido en una referencia de buenas prácticas, innovación y cercanía con la ciudadanía, y se perfila como un verdadero espejo del futuro deseado.
Una de las principales características de esta administración ha sido su compromiso con el cumplimiento de la ley y las resoluciones municipales. La transparencia en el manejo de los recursos públicos ha sido una norma, no una excepción.
A esto se suma la constante apertura a la participación comunitaria en la toma de decisiones y en la canalización de inversiones, sentando las bases de una democracia directa, tangible y operativa.
Un ejemplo emblemático de este enfoque es la iniciativa “El Alcalde en el Barrio”, impulsada por Dío Astacio, actual alcalde del municipio. Este programa busca acercar la gestión municipal a las comunidades, promoviendo el diálogo directo con los residentes, entregando utilerías deportivas, raciones alimenticias, servicios de salud, espacios donde los ciudadanos pueden expresar sus inquietudes y problemáticas.
Que esta iniciativa haya comenzado a ser replicada por otros alcaldes, lejos de ser una casualidad, es una muestra del impacto positivo de un liderazgo creativo: cuando se lidera bien, se inspira.
En materia de seguridad, Santo Domingo Este ha implementado una estrategia de vigilancia por cuadrantes, que ha convertido al municipio más grande de Centroamérica y el Caribe en el segundo más seguro de la República Dominicana.
Este logro se complementa con programas de asistencia médica en los barrios, distribución de vitaminas a embarazadas, y una activa agenda cultural, social y deportiva.
Imposible ignorar por su trascendencia, el programa municipal de enseñanza de inglés a niños, que en el presente beneficia casi 3 mil niños, y que el plan de Dio Astacio es llevarlo a 40 mil en este año. Consciente de que enseñarle inglés a un niño, es garantizarles un futuro de oportunidades.
A diario se ejecutan acciones como el cambio de bombillas para garantizar el alumbrado público, la limpieza continua de imbornales para prevenir inundaciones, la organización de competencias deportivas, la reforestación urbana y la muralización de espacios, lo que ha contribuido a una transformación visible del entorno.
Estas acciones hacen de Santo Domingo Este un laboratorio de gobernanza local efectiva y un modelo a seguir por otros municipios del país.
Con esta experiencia acumulada, muchos se preguntan: ¿Qué pasaría si esta visión de gestión se expandiera a nivel nacional? Creo que si Dío Astacio ha logrado materializar estos cambios en Santo Domingo Este, con su fe, su espíritu solidario, su eficiencia, su creatividad, su honradez, y su enfoque transparente podrían, desde la Presidencia de la República, representar la construcción de la patria soñada por nuestros próceres y héroes Trinitarios, Restauradores y Constitucionalistas.