El presidente Luis Abinader no sólo denunció el contrato del Consorcio Autopistas del Nordeste como lesivo al Estado. Incluso lo llamó infame por el costo que representa para los dominicanos. Además dio un paso adelante con el anuncio el pasado 2 de marzo, del consultor jurídico Antoliano Peralta, de que se contrataría al abogado Enmanuel Esquea Guerrero para el proceso de renegociación o para una solución conveniente. Con esas iniciativas, se podría pensar que cuando Abinader habló ya había “avances”, porque después de tanta determinación del poder nadie entendería que todo siga igual. Pero a estas alturas no hay nada nuevo, y es llamativo el silencio del asesor, quien normalmente es locuaz.