Entre cantos y oraciones fueron velados, y luego sepultados, los restos del exrector del Templo Patronal Nuestra Señora de las Mercedes, fray Máximo Rodríguez, quien falleció el pasado domingo 24 de diciembre mientras se encontraba en cuidados intensivos tras haber sufrido un infarto.

Miembros de la Iglesia, feligreses, políticos, funcionarios del Gobierno, figuras de la sociedad civil, entre otras personalidades, dieron ayer el último adiós al religioso que, durante años, se unió a las causas sociales y sirvió de voz para las necesidades del pueblo.

El velatorio de fray Máximo Rodríguez tuvo lugar en la parroquia en la que por años tuvo la rectoría: la Iglesia Las Mercedes de la Ciudad Colonial. Posteriormente, recibió cristiana sepultura en el Cementerio Nacional, ubicado en la avenida Máximo Gómez del Distrito Nacional.

Fray Máximo Rodríguez nació el 18 de noviembre de 1951 en Higüey, provincia La Altagracia. Estudió la primaria en las escuelas Hermanos Trejo y en el Colegio de La Salle, y la secundaria en la escuela Gerardo Yansen de su pueblo natal. Al terminar el bachillerato se trasladó a la ciudad de Santo Domingo y allí estudió Educación en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).

En 1970 dirigió en Santo Domingo la Juventud Franciscana a nivel nacional y en 1976 ingresó con los Padres Capuchinos para convertirse en religioso, hizo su profesión de votos temporales el 15 de agosto de 1980 y los votos perpetuos el 15 de agosto de 1983. Fue ordenado diácono transitorio el 16 de agosto de ese mismo año, para luego ser ordenado sacerdote el día 27 de agosto de 1983 por monseñor Juan Félix Pepén.

De inmediato, fue enviado como párroco a la parroquia San Pedro Apóstol de San Pedro de Macorís, hasta el año 1992. Luego, fue enviado a la parroquia San Miguel Arcángel como párroco, y también rector del Templo Patronal Nuestra Señora de las Mercedes en la Ciudad Colonial de Santo Domingo.
En septiembre del 1995 fue trasladado a la parroquia San José de la Montaña en Santiago de los Caballeros donde también fue párroco de la iglesia San Antonio y la iglesia San Andrés Apóstol de La Otra Banda.

Volvió nuevamente a Santo Domingo a la parroquia San Miguel y al Templo Patronal Nuestra Señora de las Mercedes en el 2004 hasta el 2010 y, desde el 8 de agosto del mismo año, estuvo de nuevo en Santiago de los Caballeros en la parroquia San José de la Montaña como párroco. Durante este tiempo, también trabajó en el Movimiento de Cursillos de Cristiandad como director espiritual tanto en Santo Domingo como en Santiago.

Tras durar siete años como párroco en San José, la orden franciscana lo designa nuevamente en la ciudad capital, Santo Domingo, una vez más como párroco y rector de San Miguel-Las Mercedes.
En la comunidad eclesiástica, Fray Máximo Rodríguez es recordado por el trabajo pastoral y las estructuras de empeño evangelizador que siempre tuvo. Por su compromiso con diversas causas sociales, Rodríguez obtuvo el respeto y cariño de muchos dentro y fuera de la iglesia.

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