Me resultó desconcertante que una profesional preguntara públicamente el porque tanta alarma ante el coronavirus si es como una simple gripe.

Si se lo pregunta ella, qué esperamos del resto de la población. Aquel gran segmento que no ha tenido la oportunidad de llegar a un nivel profesional como el de esa señora.

La importancia que reviste este virus ha quedado manifestada alrededor del mundo que ha comenzado a cerrar fronteras.

Estamos frente a algo nuevo, se está aprendiendo sobre la marcha, no hay vacunas aun, ni remedio alguno como resulta con la gripe o la influenza.

Sistemas de salud super avanzados como el de Italia están colapsando. Algo nunca antes visto.

Los dominicanos, con un Sistema de salud precario, debemos vernos en ese espejo y no minimizar la situación.

El coronavirus en si no es mortal, solo un 2% se asegura, dato que puede variar puesto a que se está frente a algo nuevo, completamente nuevo.

En principio se decía que debíamos mantener la distancia entre uno y otros a dos metros, ya eso cambió ahora se sugiere a 4 metros o más.

No es mucho lo que se nos está pidiendo a nivel mundial: higiene, recogimiento, no exponerse innecesariamente a concurrencias a multitudes. Ponernos en pausa por un tiempo será siempre mucho mejor que tener que decidir quien si y quien no morirá por la escasez de equipos, de camas, de condiciones y herramientas necesarias para enfrentar algo que se nos viene encima como una avalancha y no de nieve.

Las autoridades sanitarias deben hacer más énfasis en este sentido. Las escuelas, las universidades, los gimnasios, las peluquerías, los cines, todo lo que se pueda posponer, se posponga.

Celebración que implique una numerosa concurrencia debe ser aplazada, el mundo se está poniendo en pausa. No esperemos que nos arrope el coronavirus para emprender acciones como ocurrió en otros lares y ahora están colapsando sus servicios sanitarios.

Toda exposición innecesaria debe posponerse y las que sean inevitables tomar todas las medidas de higiene posible.

Sin entrar en pánico debemos ser sensatos, pensar que de cada quien depende que no se propague.

El costo económico, por alto que sea, no vale más que la vida misma.

Depongamos esa actitud de indiferencia o minimizarlo. Estamos ante una pandemia, el mundo debe desacelerarse. Vamos a ponernos en pausa. Sera tan dificil?

Posted in Destacado, Opiniones, País, Panorama

Más de destacado

Más leídas de destacado

Las Más leídas