Ciudad del Vaticano. Al deplorar los “vientos de guerra” que azotan el mundo, el papa Francisco en su tradicional mensaje navideño llamó ayer a una solución de dos estados para hallar la paz en el Medio Oriente y oró por la superación del enfrentamiento en la Península Coreana.

El papa se refirió en particular a las zonas de tensión global donde el presidente estadounidense Donald Trump cumple un papel crucial. La decisión de Trump de reconocer a Jerusalén como la capital de Israel ha reanimado la violencia en la región, en tanto el enfrentamiento con Corea del Norte debido a sus ensayos nucleares ha escalado las tensiones en Asia.

Los “vientos de guerra y un modelo de desarrollo ya caduco sigue provocando degradación humana, social y ambiental”, dijo el papa en su mensaje tradicional y bendición “Urbi et orbi” (a la ciudad y el mundo) desde el balcón central de la Basílica Vaticana. Además se refirió a la situación de Venezuela, que enfrenta una profunda crisis.

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