El Papa Francisco
El Papa Francisco

Buenos Aires, (EFE).El Papa Francisco criticó duramente la hipocresía de las potencias mundiales que, por un lado, organizan conferencias de paz y, por otro, financian la industria armamentista. En una entrevista difundida este viernes por el canal Orbe 21 del Arzobispado de Buenos Aires, el pontífice expresó su preocupación por la falta de coherencia entre los discursos y las acciones de los líderes internacionales.

“Los encuentros que se hacen para lograr la paz son encuentros de intereses”, afirmó el Papa durante su conversación con la periodista Bernarda Llorente.

Francisco también cuestionó la efectividad de los llamados a la paz de las organizaciones internacionales.

“Me preocupa que los innumerables llamados a la paz entren por un oído y salgan por el otro. Hay una hipocresía de base: hablamos de paz, pero fabricamos armas para la guerra”.

El Papa señaló que, en Europa, las fábricas de armas representan una de las inversiones más rentables, lo que contradice los esfuerzos diplomáticos.

Preocupación por la guerra y la autodestrucción

Refiriéndose a las guerras actuales en Ucrania y Tierra Santa, Francisco las calificó como conflictos que no respetan las reglas tradicionales:

“En Tierra Santa no es una guerra con reglas normales, y en Ucrania hay una gran hipocresía. Urge un tratado de paz, pero cuando uno habla de paz, comienzan a desviarse hacia cuestiones secundarias”.

El Papa también reflexionó sobre el peligro de la tendencia global hacia la autodestrucción, evocando la imagen bíblica de la Torre de Babel:

“En esta época de progreso científico y mecánico, me preocupa que estemos construyendo una nueva Torre de Babel. Pero son ideas que me vienen”, compartió.

Sobre el nacionalismo extremo, Francisco alertó sobre los riesgos de mezclar religión y política.

“El peligro surge cuando una religión se transforma en política de Estado. Lo religioso debe mantenerse separado de lo político”.

El Papa destacó el rol de la Unión Europea como promotora del diálogo, aunque reconoció que sus instituciones han perdido fuerza:

“Si no hay diálogo, no habrá paz. De un conflicto se sale por arriba; no con la destrucción de una de las partes”.

Finalmente, Francisco subrayó la importancia del diálogo para resolver conflictos, recordando que detrás de cada uno de ellos hay verdades, reclamos justos o incluso irracionalidades que deben ser abordadas con apertura y negociación.

Posted in Internacionales

Más de panorama

Más leídas de panorama

Las Más leídas