Por motivo a su cincuenta aniversario, la Asociación Dominicana de Rehabilitación celebró ayer una misa oficiada por monseñor Amancio Escapa, en la Catedral Primada de América.En las palabras de agradecimiento Mery Pérez de Marranzini, fundadora de la institución de ayuda a las personas con discapacidad, resaltó la labor de la sociedad dominicana y del empresariado en beneficio de la entidad. “No es porque sea mi hijo pero es un gran hombre”, dijo acerca de Celso Marranzini, quien se encontraba próximo a ella.
Arturo Pérez Gaviño, director ejecutivo de Rehabilitación, mostró preocupación por la gran cantidad de motociclistas que quedan discapacitados por accidentes de tránsito.
En la eucaristía estuvieron presentes la primera Dama de la República, Cándida Montilla de Medina, ejecutivos de la junta directiva de Rehabilitación, así como empresarios, funcionarios públicos y directivos de organizaciones no gubernamentales.