Para quienes no gustan de hacer ejercicio solos o se aburren fácilmente de seguir una rutina en el gimnasio, contratar entrenador personal puede ser una excelente opción.Tener un profesional exclusivamente para nosotros, que nos indique ejercicios específicos adaptados a nuestras necesidades y que se quede a nuestro lado observándonos y chequeando que todo esté bajo control, puede hacer que nos ejercitemos mucho mejor.
Cuando vayas a contratar un entrenador personal, pregúntale dónde ha estudiado, qué títulos tiene, si está certificado por una organización de renombre… en fin, todo lo que se te ocurra para corroborar que sea un entrenador de verdad y no un improvisado.
Pero hay otra cosa tan importante como la preparación, y es la vocación de ayudar. Debe ser una persona paciente, que te transmita motivación y entusiasmo, y te aliente a alcanzar tus metas. En otras palabras, alguien que esté dispuesto a ayudarte.
