Consenso en la Cámara

La Cámara de Diputados en la República Dominicana es probablemente la institución pública en la que converge una mayor cantidad de intereses partidarios y personales distintos, compuesta de casi 200 legisladores electos no sólo para representar&#8230

La Cámara de Diputados en la República Dominicana es probablemente la institución pública en la que converge una mayor cantidad de intereses partidarios y personales distintos, compuesta de casi 200 legisladores electos no sólo para representar diversas zonas del país sino, especialmente, diferentes partidos políticos y diferentes corrientes dentro de esos mismos partidos, lo que sin duda lleva a pensar que lograr acuerdos en el seno de la Cámara baja no es trabajo fácil.

Por eso sorprende que en los últimos 3 años virtualmente todos los proyectos de ley aprobados en ese organismo lo fueron producto de consensos sin atropellos, la mayoría de ellos con más de las dos terceras partes de los votos (cual si fuesen todas leyes orgánicas) y sin muestras de imposiciones por parte del partido de gobierno.

Esta sorprendente gerencia y organización coincide con la presidencia en la Cámara de diputados del santiaguero Abel Martínez Durán, del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), quien es muy valorado en su provincia y ha sido electo en varias ocasiones con muy altos niveles de votación.

Esto demuestra que el diputado no sólo tiene una hoja de trabajo limpia e interesante en la que se destacan iniciativas de mucho interés para la justicia como la ley que crea de manera formal el trascendental Recurso de Amparo y un trabajo previo meritorio como fiscal de su provincia, sino que además cuenta con un gran liderazgo que le ha permitido lograr la hazaña de manejar sin tranques ni altercados uno de los grupos más difíciles del país.

Por otro lado, este diputado no tiene tasa de rechazo ni siquiera en los partidos de oposición que adversan el que él representa y no obstante su vasta experiencia en la política es un hombre joven, lo que sin duda es mucho más representativo de un país que tiene la población con más juventud de toda América Latina.

Ojalá cualidades como las del diputado Abel Martínez, quien constituye un ejemplo de una nueva, más moderna y mejor manera de actuar en la política, sean las que imperen en la mente de quienes eligen la cabeza de la Cámara de Diputados cada año, para que la confirmación en el cargo sea la más lógica y clara alternativa.

Y que esto sirva de pie de amigo para llevar a personas con esos atributos a las más altas instancias de poder en República Dominicana. l

Posted in Sin categoría

Más de

Más leídas de

Las Más leídas