El Centro de Información y Comunicación (CICOM) presentó ayer a turoperadores, agentes de viaje y dirigentes del sector turismo el proyecto “Ecorutas Turísticas”, creado por el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
De esa forma se busca promover el uso de las comunidades y el turismo local e internacional, de ecosistemas de gran valor recuperados y restaurados.
El presidente de CICOM, Quiterio Cedeño, presentó tres ecorutas turísticas que integran una amplia gama de atractivos naturales, culturales y sociales, en áreas adecuadas para actividades amigables con el medio ambiente. Varios documentales presentados al público que asistió a la presentación, realizada en el hotel El Embajador, dejaron al descubierto la impresionante riqueza –no explorada por mucha gente- que tiene República Dominicana.
Las tres ecorutas son la del Ozama, María Trinidad Sánchez y Santo Domingo Oeste. Ecoruta del Ozama ofrece la posibilidad de programar excursiones y actividades en los ecosistemas y parques recuperados en la rivera del Ozama y sus diversos afluentes.
La Ecoruta María Trinidad Sánchez tiene como puntos de interés el Refugio de Vida Silvestre la Gran Laguna o Perucho, el lago el Duvú y los monumentos naturales El Saltadero, Cabo Francés Viejo y la Laguna Gri-gri. Mientras, la Ecoruta Santo Domingo Oeste integra espacios con restauración ecológica, Centro de Protección y banco de semillas endémicas, ecosistemas de manglares, lagunas y observación de vida silvestre.
Para utilizar las ecorutas hay que cumplir una serie de requisitos según explicó Quiterio Cedeño y seguir una serie de observaciones.
Las solicitudes de los permisos para hacer turismo en las zonas que conforman las ecorutas no implica la realización de ningún pago. Dentro de las próximas ecorutas que se habilitarán se encuentra la de Tamayo y Bahoruco.
Generación de riquezas
El ministro de Medio Ambiente, Jaime David Fernández Mirabal dijo en el acto de ayer que lo importante es que desarrollando las potencialidades de las ecorutas bajo el principio de la conservación se genere riqueza que contribuyan a mejorar las condiciones de vida de las poblaciones del entorno.
