Tras muchos años sin presentarse en el país, muchos eran lo que esperaban con ansias ésta presentación, y fue evidente, ya que hasta los famosos piquitos de Chavón fueron llenados por completo. Al son de tamboras y con contagiosos movimientos de cinturas, Franco De Vita inició su presentación lleno de energía, la cual logró mantener hasta el final.
Sin mucho protocolo y cual metralladora, comenzó a disparar de manera consecutiva éxitos como: “Dónde está el amor”, “Louis” y “Fuera de este mundo” logrando sumir al público en un estado de frenesí, para luego continuar con los duetos propios del disco “Primera Fila”.
El primer invitado fue Pedro Capo -bien conocido en el país gracias a un dueto con Thalia- a quien le tocó entonar el tema “Cálido y frío”, logrando una asombrosa conexión entre ambos.
El siguiente dúo de la noche lo protagonizó la cantautora Kany García, quien ahora luce una cabellera larga, mostrándose más femenina. Ella fue la elegida para remplazar a la controversial Alejandra Guzmán, para el tema “Tan sólo tú”. Otro invitado especial fue Leonel García, quien fuera miembro de Sin Banderas, quien entonó la conocida canción “Entra en mi vida”, para luego compartir el escenario con Franco para el tema “Si la vez”. Leonel también aprovecho el escenario para presentar su nuevo sencillo. La última invitada internacional tenía a su cargo interpretar el tema “Si quieres decir adiós”, y Debi Nova lo hizo con excelente dominio escénico, envolviendo a los presentes con su melodiosa voz.
Es evidente que De Vita está empeñado en apoyar el talento joven, pues este tour es una muestra de como se puede compartir el escenario sin egos ni delirios de grandeza. Cada uno de sus invitados tiene su momento de esplendor en dónde se les permite dar a conocer sus propios temas.
El show osciló entre lo romántico y lo jocoso. Haciendo que muchos se apretaran el pecho por momentos y que otros soltarán una sonrisa, demostrando un dominio de la tarima propio de los grandes. El venezolano, cuando tenía la oportunidad de hablar, resaltaba que se sentía en el “paraíso” y que no veía la hora de regresar.
Los ánimos siguieron al máximo cuando se escucharon los acordes de “Tú de que vas”, “Sexo”, “Te amo”, “Si tú no estás aquí” y “Ay Dios”. Nueve músicos acompañaron a Franco, quienes demostraron un excelente talento, logrando que el show intermedio de la presentación de la banda fuera uno de los más aplaudidos.
Todos gozaban. La abuela, la sobrina, el esposo, la amiga, el hermano y hasta el productor del evento Saymon Díaz, quien suele estar siempre muy concentrado y tranquilo, lucio feliz y animado cantando a todo pulmón.
“Será”, “Tengo”, “Mi sueño” y “Sólo importas tú” fueron las siguientes del playlist, anunciando casi el fin, pero faltaba mucho más.
Uno de los momentos cubres de la noche llegó con la arribo al escenario de Pavel Nuñez. El tema “Te di”, del joven cantautor fue coreado como un himno dejando atónito al propio Franco De Vita quien no pudo evitar su emoción y parafraseó su línea favorita: “Te di mi gran historia, la única que tenía. C… (Palabra muy conocida por los Dominicanos y que se usa para expresar múltiples emociones, pero que no podremos publicar)”. Con Pavel cantó “Te veo venir soledad” y “Traigo una pena”. El dominicano lució seguro y de buen humor, haciendo improvisaciones y robándole por momentos el protagonismo a De Vita.
El fin se hacía inevitable, por lo que había que concluir de la mejor manera. “No Basta”, “No hay cielo” y “Claro que se perder” sonaron para la despedida. En total sonaron unos 23 temas de los cuales, algunos se incluyeron en un popurrí, logrando así complacer a la mayoría de los asistentes.
De Vita es un abanderado de la evolución y la modernidad, cosa que se evidencia en los nuevos arreglos que le aportó a cada uno de sus éxitos, convirtiéndose en un maestro en adornarlos con nuevos sonidos sin llegar a adulterar el concepto original. Cosa que se pudo notar a lo largo de la noche, pues aunque se trataron de los éxitos de siempre, muchos tenían ingredientes nuevos.
Hace mucho no se vivía un concierto que conjugara la emoción del público, la buena organización y el carisma de un cantante que disfrutó incluso más que sus fanáticos. El que se lo perdió, perdió mucho.
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