El candidato presidencial del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Hipólito Mejía, calificó ayer la corrupción como la traición suprema al pueblo y se comprometió a combatirla en cualquiera de sus manifestaciones, sin importar quiénes sean los responsables.
Mejía hizo el compromiso durante un conversatorio que sostuvo con miembros del movimiento cívico Participación Ciudadana, el Ministerio de Administración Pública, gremios empresariales y otros integrantes de la sociedad civil.
Al llegar el momento de las preguntas y respuestas, Mejía reaccionó agitado al preguntársele, “¿cómo pretende usted dar ejemplo y confianza a la población de que va a combatir la corrupción cuando usted está acompañado y rodeado de personas que frente al pueblo están desacreditadas por corruptos?”, cuestionamiento hecho por Lucenia Pichardo, coordinadora de la Red Nacional de Acción Juvenil, quien reflexionó sobre las actuaciones de algunos funcionarios del gobierno de Mejía.
En ese sentido, Pichardo hizo referencia a los directivos del Plan de Renovación Vehicular (Plan Renove), Fabio Ruiz y Pedro Franco Badía, y a Pedro Julio Goico Guerrero (Pepe), quien fue descargado por un tribunal luego de ser acusado de lavado de activos y el uso que hizo de una tarjeta de crédito del quebrado Banco Intercontinental (Baninter). Mencionó también a Ángel Lockward, Víctor Céspedes, Radhames García y Hernani Salazar.
“De una forma u otra ellos fueron acusados de actos de corrupción que están todavía bajo investigación y otros fueron condenados”, agregó.
A esto, Mejía contestó que él mismo dispuso que fueran sometidos a la Justicia los funcionarios que fueron acusados de corrupción durante su gobierno.
Refirió que fueron juzgados y condenados, pero que luego fueron liberados mediante indultos.
“A Pepe Goico, yo mismo le dije que fuera y se trancara. Luego se descubrió que esa misma tarjeta de Baninter la usaba Leonel Fernández, y que gastó un millón de dólares del dinero de Baninter”, adujo.
En su discurso, Mejía planteó las iniciativas que realizaría para combatir la duplicidad de funciones, la corrupción y la distribución desbalanceada de la inversión pública. Dijo que hará cumplir las leyes que obligan a la rendición de cuentas y a la transparencia en el manejo de los fondos públicos.
Aseguró que “la corrupción en el país, lejos de perder terreno se ha fortalecido al pasar del puesto 47 en el 2004 al puesto 140 en el 2011, entre los 142 países evaluados por el Foro Económico Mundial”.
