Al comenzar un año, muchas son las metas que las personas suelen trazarse, las cuales van desde terminar la universidad, comprar una casa o terminar de pagar el préstamo del carro. Sin embargo, posiblemente, la meta de perder peso es la más popular de todas. Para ello, no solo hace falta el deseo de tener una silueta delgada, también es necesario tener fuerza de voluntad, constancia, motivación y la correcta orientación.
Muchas personas optan por hacer dietas rápidas, las cuales solo provocan un descontrol en su metabolismo y que en poco tiempo recuperen el peso perdido, y en algunas casos hasta el doble del que tenía. Por eso, la mejor opción es realizar un cambio desde la raíz del problema, tu mala alimentación y la falta de ejercicio.
Luego, solo hace falta poner en marcha un plan alimenticio en el que puedas comer saludable. Esto no quiere decir que debes comer solamente “hojas” (vegetales), sino que encuentres un balance. Según los nutricionistas, no hay alimentos buenos o malos, solo dietas mal balanceadas, y el éxito es buscar el equilibrio calórico y mantener una buena relación con los alimentos, procurando que sean siempre nuestros aliados y no nuestros enemigos.
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