Con un gran potencial y el deseo de transmitir sus conocimientos, Netalit Féliz se ha convertido en un emprendedor que se ha empeñado en despertar el interés de otros para iniciar su propia empresa.“Siempre lo he dicho, la discapacidad está en la mente de las personas, yo soy un ejemplo”, expresa el joven de 32 años, oriundo de Barahona, a quien una discapacidad físicomotora no le ha impedido hacer realidad sus sueños de convertirse en un artesano del larimar.
En el año 2003 Netalit tuvo un accidente que lo imposibilitó para trabajar. En esa condición, sentado en su silla de ruedas, se dedicó a observar cómo su cuñado y un amigo, procesaban el larimar.
Al poco tiempo, Netalit comenzó a trabajar sus primeras piezas elaboradas con los materiales sobrantes de sus amigos.
“Un día saqué los trabajos que hice con los recortes y se los mostré. Estaban asombrados, me preguntaron si realmente lo había hecho yo. No podían creerlo, aunque me apoyaron dándole los toques finales”, narra Netalit a elCaribe.
A partir de entonces, quedó convencido de que su discapacidad realmente no era una barrera, y que “tenerla no impide absolutamente nada. Lo que se requiere es la fuerza y el amor que impele dentro de ti”, asegura.
Después de un tiempo, su cuñado dejó el taller, pero Netalit continuó poco a poco con esas labores y logró perfeccionar su habilidad.
“Un mes después, apareció un señor con un trabajo en joyería, y dejaron la joya para que yo lo hiciera porque nadie podía. Me tomaba hasta media hora para hacer una pieza, pero quedaba perfecta. Fue a partir de ahí cuando me perfeccioné con el larimar”, cuenta.
El taller que hoy dirige está dividido en dos áreas: joyería y artesanía. Bajo su mando están nueve empleados, que con entusiasmo cada día hacen de esa piedra, joyas preciosas.
La temporada en la que más dinero hace es de noviembre a abril por la cantidad de turistas que visitan la provincia sureña. Dice que ha logrado reunir hasta RD$50,000 en un mes por la venta de joyas.
“En la época más lenta, hago otro tipo de trabajo: reparo celulares y GPS, esto me permite tener una mejor administración en mi negocio, porque de abril en adelante no se vende casi nada”, agrega el emprendedor.
Antes del accidente Netalit se desempeñaba en varios trabajos, entre ellos construcción y ayudante de compras, y cuando se veía sin empleo formal trabajaba en lo que aparecía.
“Yo he hecho de todo. Antes de tener el accidente conchaba en un motor, pescaba, vendía cosas en la calle, trabajaba en un hotel como steward (camarero), me buscaba la vida de cualquier forma porque siempre quise ser independiente”, narra Netalit mientras se dibujaba una sonrisa en su rostro.
Fundación “Larimar Solidario”
El trabajo que desarrolla Netalit en el taller, lo motivó a crear una fundación para ayudar a otros.
“La idea de la fundación “Larimar Solidario”, fue de un amigo de un español, pero desde un principio mi deseo fue transmitir el conocimiento a todo tipo de persona sin importar si tiene discapacidad o no”, indica.
A través de la fundación, que arriba a dos años y medio, se creó una escuela donde se han capacitado, hasta el momento, más de 30 personas, de las cuales seis ya tienen sus empresas, incluyendo dos personas sordas.
Hoy la fundación funciona como una escuela para capacitar a quienes deseen ser emprendedores.
“No importa la discapacidad, una persona sin ideas y sin metas se puede comparar con un barco que no tiene timón y que no sabe a dónde va. En cambio, una persona con metas mira hacia el futuro y se puede comparar con un barco que no necesita ni de la vela, ni del viento para navegar, sino que su fuerza viene del interior”, expresa.
Cuenta Netalit que la escuela funciona de manera gratuita para cuantos deseen capacitarse en el municipio de La Ciénaga y de las zonas aledañas en la provincia de Barahona, y los motiva a ser emprendedores como él.
El 7% de la población tiene algún tipo de discapacidad
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la discapacidad como la “restricción o ausencia de la capacidad de realizar una actividad en la forma, o dentro del margen de lo que se considera normal para el ser humano”. Según los resultados de la Encuesta Nacional de Hogares de Propósitos Múltiples (ENHOGAR 2013) de la Oficina Nacional de Estadística (ONE), en República Dominicana la población con algún tipo de discapacidad asciende a 708,597 personas, de una población de 10,177,007. En torno a los resultados de la discapacidad, los datos arrojados muestran que del 7% de personas con algún tipo de discapacidad en el país, el 51.7% son hombres y 48.3% son mujeres. Mientras que el 74% vive en la zona urbana y 26% en la zona rural.
Motivación
“Todo lo que tú hagas, hazlo con amor y pasión, y mantén siempre la fuerza constante que emerge de tu interior”.
