En una sesión de más de ocho horas, la Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD), la Asociación Dominicana de Zonas Francas (ADOZONA), el Consejo Nacional de Competitividad (CNC) y el Ministerio de Industria y Comercio (MIC) concluyeron el Segundo Congreso de la Industria Dominicana. La apertura del acto estuvo encabezada por el presidente de la República, Leonel Fernández, que no agotó turno para hablar.
El congreso concluyó que, en el nuevo contexto internacional de políticas industriales activas y con el fin de promover la generación de empleos formales y asegurar un clima macroeconómico estable y competitivo, los participantes asumirán ocho compromisos troncales para los próximos cinco años, compromisos que fueron rubricados por seis candidatos a la presidencia de la república: Danilo Medina, del PLD; Hipólito Mejía, del PRD; Max Puig, de Alianza por la Democracia y Guillermo Moreno, de Alianza País; Eduardo Estrella, de Dominicanos por el Cambio.
Compromisos asumidos
El primer compromiso consiste en fortalecer el clima de negocios en la República Dominicana, de modo que se logre un aumento importante de las exportaciones del país, en busca de disminuir el déficit en la balanza comercial dominicana. El segundo compromiso expresado por los participantes busca asegurar una infraestructura adecuada para el desarrollo de parques y zonas industriales, sumado al impulso de logísticas para explotar la posición estratégica de la República Dominicana en el centro del archipiélago caribeño.
El tercer punto acordado consistió en brindar apoyo a la creación de instrumentos que faciliten el acceso al financiamiento competitivo para las industrias dominicanas, en especial para las pequeñas y medianas. El cuarto punto busca garantizar una mayor coordinación entre las entidades gubernamentales y el sector privado para promover la competitividad del sector industrial. El quinto punto se propone promover la cultura de la calidad, innovación e investigación y desarrollo en el sector manufacturero, en alianza con los sectores académicos. El sexto compromiso es fortalecer el desarrollo de encadenamientos productivos entre las industrias locales, zonas francas, pymes, turismo y agropecuaria. El acápite siete llama a impulsar una política de compras gubernamentales que priorice la producción local de las grandes, medianas y pequeñas industrias. El punto final busca preservar y profundizar las medidas en el sector eléctrico enfocadas a su eficiencia y profesionalización.
Las propuestas del congreso
Yandra Portela Vila, coordinadora general del congreso, presentó las propuestas que surgieron de las siete mesas de trabajo que, tras 600 horas de discusiones, presentaron sus conclusiones. La mesa de financiamiento presentó tres propuestas: primero, la creación de un banco de desarrollo y apoyo a las exportaciones a los fines de financiar el desarrollo del sector industrial y ampliar y diversificar las exportaciones dominicanas. Dicha entidad financiera ofrecería una amplia gama de productos financieros y contaría con un capital inicial de US$100 millones, apoyado por Exim Bank de Corea del Sur. En segundo lugar, la creación de un sistema de garantías recíprocas que proporcione acceso al financiamiento al sector de pymes, para integrarlo en el sistema financiero del país, haciéndolo sujeto de crédito y, finalmente, adecuar el Reglamento de Evaluación de Activos (REA), con el fin de hacer permanentes las siete dispensas establecidas hasta la fecha como transitorias. Esta mesa expuso, a su vez que apenas el 6% de la cartera de crédito del sector financiero se dedica al sector manufacturero, a la vez que señala que la República Dominicana es el segundo país de Latinomérica que menor porcentaje de crédito dedica al sector productivo.
La mesa de política comercial, exportaciones y sostenibilidad ambiental concluyó eficientizar la plataforma exportadora, a través del apoyo a las gestiones que está llevando a cabo la Dirección General de Aduanas para la implementación de una Ventanilla Única de Comercio Exterior y el programa de Operador Económico Autorizado; la puesta en funcionamiento de la Mesa Presidencial de Exportaciones; el fortalecimiento de la estrategia de promoción de la oferta exportable, por medio de la asignación exclusiva de los recursos obtenidos mediante la recaudación de las tasas impuestas al proceso de exportación, hacia actividades de promoción de la oferta exportable; y la creación de capacidades para facultar a los representantes consulares y diplomáticos en la promoción de exportaciones.
La mesa de promoción de encadenamientos productivos propuso crear la Dirección de Encadenamientos Productivos, fortalecer el Registro Industrial del Centro de Desarrollo y Competitividad (Proindustria) y promover un compromiso de Estado para las contrataciones y compras de la producción nacional.
La mesa de infraestructura y energía señaló, entre otros puntos, “la obsolescencia de la Ley 241 que regula el tránsito y el transporte ha traído como consecuencia grandes distorsiones en estos servicios tan prioritarios para la sociedad y la economía del país”. Esta mesa se pronunció contra “el monopolio del transporte en manos de unos cuantos empresarios, seudo llamados sindicalistas”. Esta mesa, asimismo, destacó que “a pesar de los avances que hemos tenido en los últimos meses, el problema del suministro electricidad y las amenazas de cambios de reglas de juego constituyen factores que desincentivan la inversión de las industrias y elevan sus costos de producción. Nos encontramos en una etapa de transición en la que el sector eléctrico requiere de continuidad y de profundización en los planes de inversión en la diversificación de la matriz energética”.
La mesa de fomento del empleo formal propone desarrollar iniciativas para hacer atractiva la formalización de las pequeñas y medianas industrias, readecuación del Código Laboral y modificar la normativa legal para que el pago del ITBIS sea diferido y sea pagado a la DGII a los 90 días de ser emitida la factura. Destacaron, asimismo, que “alrededor de 57% de las personas ocupadas en nuestro país trabajan en el sector informal de la economía, sector que ha absorbido una gran parte de los nuevos trabajadores que anualmente entran en el mercado laboral” y que “la República Dominicana es la economía de América Latina y el Caribe con la más alta tasa de desempleo, un 14.4% vs. un 6.8% de la región, a pesar de que, paradójicamente, ha sido la que mayor crecimiento ha registrado en su PIB”.
Manuel García Arévalo Ministro de industria y comercio
García Arévalo confía en que las propuestas y conclusiones del Segundo Congreso de la Industria Nacional constituyan un elemento fundamental para superar el gran desafío de colocar al sector industrial en mejores condiciones para avanzar en productividad y competitividad, y que contribuyan a “crear más puestos de trabajo formales y dignos que permitan incrementar la capacidad de consumo de los trabajadores y mejorar la calidad de vida de nuestros conciudadanos”, dijo al intervenir en la apertura del congreso.
El blanco consiste en crear más desarrollo
Las 35 propuestas buscan alcanzar las siguientes metas al 2017: incrementar las exportaciones de 8,537 millones en el 2011, a 20 mil millones; crear 200 mil nuevas fuentes de trabajo en el sector manufacturero; pasar de 7,800 a 10 mil industrias; crecer en cinco años un 35%; e incrementar de 209 a 500 las empresas que exportan más de un millón de dólares.
