La discusión de la educación que demanda la generación escolar y universitaria de hoy es diferente a la de años atrás, ya los temas de desayuno escolar, pupitres, instalaciones físicas, etc.., son temas superados hace décadas por países desarrollados, sin embargo para nosotros son problemas actuales que todavía estamos buscando solución. Esto nos mantiene atrasados con respecto a países desarrollados cuya preocupación hoy en día va más orientada a la ciencia, tecnología, desarrollo e investigación.
Este año estrenamos el 4% del PIB para la educación primaria, con $99,000 millones de pesos de presupuesto anual, pero cuando entramos a ver la distribución presupuestaria gran parte está destinado a gastos corrientes e infraestructura escolar, y solo el 0.27% se destina a Gestión y Desarrollo Tecnológico, en el caso del Ministerio de Educación Superior Ciencia y Tecnología con $10,000 millones de presupuesto, solo destina el 0.41% a un Fondo de Desarrollo Ciencia y Tecnología.
El contraste es que los presupuestos de Optic, Itla y el Infotep no llegan a $500 millones de pesos anuales, cuando tienen los compromisos de trazar políticas públicas en término de tecnología gubernamentales, formar profesionales en la rama de IT, y a nivel técnico profesional. Estas instituciones necesitan de un mayor presupuesto dado sus responsabilidades, y deben sumar esfuerzos junto con las universidades para crear los profesionales que hoy necesitamos, de la mano con una política tecnológica de desarrollo Estatal.
De lo contrario seguiremos formando bachilleres que se irán a estudiar fuera becados por un estado pobre a quedarse al servicio de países ricos, seguiremos formando profesionales que ya no demanda la sociedad de hoy, por eso no encuentran empleos, y seguiremos formando costosos estudiantes de primaria que terminan debajo de una árbol o ¨mata¨, alimentando la economía del colmado y el moto concho, lo cual seguirá haciendo crecer la pobreza y el atraso en la República Dominicana.