Ya sea por rapidez o por desconocimiento, la mayoría de la población no se cepilla adecuadamente, ni las veces necesarias lo que dificulta la higiene bucodental. Esta situación trae consecuencias perjudiciales para la salud bucal que deriva en afecciones que, en ocasiones, son difíciles de tratar. Hay quienes dicen que la rapidez de la vida actual puede repercutir en la falta de higiene de los dientes por los horarios de trabajo, el estrés y la mala calidad de las comidas que ingerimos.

Esto propicia, según la odontóloga Ninoska Abreu, las afecciones bucales más comunes entre las que están: la caries dental, la gingivitis y periodontitis. Asimismo, los cánceres bucales y traumatismos bucodentales, las cuales se pueden prevenir.

Familia realizando su higiene bucodental.

Día Mundial de la Sonrisa

El Día Mundial de la Sonrisa se celebra anualmente el primer viernes del mes de octubre. Son 24 horas para promover y contagiar la alegría y diversión a los demás. El fin de esta celebración es fomentar y recordar los innumerables beneficios de la risa en nuestro día a día. Por otro lado, tomar consciencia acerca de la importancia de la salud bucal. Por ello, compartimos estos cuatro hábitos fundamentales:

Correcta rutina de higiene bucodental

Hábitos saludables para tener higiene bucodental como tener una adecuada rutina de higiene oral, es un factor clave. Además de cepillar los dientes mínimos dos veces al día, es preciso utilizar técnicas adecuadas para asegurar una limpieza bucodental óptima.

Uno de los métodos más utilizados consiste en inclinar el cepillo a un ángulo de 45° contra el borde de la encía. Asimismo, deslizar el cepillo alejándose de ese mismo borde y hacia adelante. Asimismo, se recomienda cepillar suavemente el exterior e interior y la superficie de masticación de cada diente con movimientos cortos hacia atrás. Y, por último, limpiar la lengua para eliminar las bacterias y refrescar el aliento.

“El uso de una crema dental con 1000 ppm fluoruro, que garantice el cuidado del esmalte y la eliminación de la placa bacteriana, así como cambiar el cepillo de dientes cada tres meses y usar hilo dental, constituyen hábitos diarios indispensables para conseguir una rutina de limpieza dental eficaz, y, por ende, mantener una buena salud del diente y la encía”, asegura la experta en cariología, Abreu.

Alimentación saludable

Para Abreu, otro componente de gran incidencia en la protección de la salud bucal es una alimentación saludable y equilibrada, evitando el abuso de azúcares. LaAsociación Dental Americana (ADA, por sus siglas en inglés) sugiere incluir productos lácteos, frutas y verduras con alto contenido de fibras y vitaminas en nuestra dieta diaria, lo que además de ser beneficioso para la salud bucal, también tiene efectos sumamente positivos para el organismo en general.

Mientras que el consumo en exceso de tabaco, bebidas alcohólicas, café o té con azúcar, así como la ingesta de otros alimentos con altos niveles de azúcares, tales como los dulces, refrescos, jugos, galletas, pasteles y papas fritas, por mencionar algunos, pueden llegar a ser perjudiciales para lograr la sonrisa saludable deseada.

Visita periódica al odontólogo

Para nadie es un secreto que acudir a tu dentista para prevenir y detectar posibles problemas bucodentales a tiempo resulta primordial. El cuidado de la salud bucal es una inversión en la salud general porque, como dice la doctora Abreu, lo que sucede en la boca afecta a todo el cuerpo. 

Establecer la visita al odontólogo como parte de los chequeos rutinarios podría prevenir la mayoría de los problemas de la salud bucal. También tiene un papel clave en la detección temprana, de manera tal que la enfermedad pueda ser tratada de forma exitosa y causar mínimos efectos en las rutinas diarias de las personas.

La frecuencia para visitar al dentista dependerá del estado bucodental del paciente y del riesgo de padecer ciertas enfermedades de la boca. La experta en cariología señala que será el profesional de la salud bucal, luego de una evaluación, que indicará si deberás acudir al consultorio cada tres o seis meses.  Esto siempre y cuando no experimentes algún problema o molestias en la boca. Si es así, es importante agendar tu cita inmediatamente y no esperar a que la situación empeore.

Mantén limpio tu cepillo

Los cepillos dentales pueden cultivar gérmenes, hongos y bacterias. Por eso es el valor de que después de cada cepillado, lavarlo con agua y colocarlo en posición vertical para que se ventile. Secar el cepillo es esencial para reducir la formación de gérmenes.

Asimismo, se aconseja evitar que el cepillo esté en contacto con otros y nunca compartirlo con otra persona, ni siquiera con un miembro de tu familia. Si lo llevas contigo a la oficina o durante un viaje, lo ideal es colocarle un protector plástico para evitar aplastar las cerdas y que pueda adquirir algún patógeno. Al llegar a casa o a tu destino debes lavarlo y ventilar para que no se generen bacterias. 

El cepillo dental trabaja dentro de la boca, por lo que debemos mantener un máximo de higiene para evitar consecuencias no deseadas en todo nuestro cuerpo.

Finalmente, hay que tomar en cuenta las edades donde las personas son más susceptibles y pueden requerir acompañamiento especial, por ejemplo, los niños, que dependen de un adulto que los cuide, y los adultos mayores, quienes, en ocasiones, utilizan medicamentos que disminuyen el flujo de la saliva y los vuelven más propensos a padecer caries dental.l

Posted in EstiloEtiquetas

Más de gente

Más leídas de gente

Las Más leídas