Para dejar fuera a una jueza de la Suprema Corte de Justicia (SCJ) no era necesario someterla al escarnio público, que develó que se trató de una conspiración para deshonrarla. Un propósito que conllevó el uso de los recursos del Estado contra una persona. Como el Ejecutivo tiene una mayoría absoluta en el Consejo Nacional de la Magistratura (CNM) bastaba con escucharla, como ocurrió con la mayoría de sus colegas que quisieron repetir, y desecharla. Así de simple, pero no… Tenía que ocurrir todo eso, y peor aún, las malas artes utilizadas, como el espionaje telefónico, el ataque obsesivo, persecutorio, a su intimidad. Eso es abuso de poder, desde el Estado. ¿Qué harán ahora?
Abuso de poder
Para dejar fuera a una jueza de la Suprema Corte de Justicia (SCJ) no era necesario someterla al escarnio público, que develó que se trató de una conspiración para deshonrarla. Un propósito que conllevó el uso de los recursos del Estado contra una persona.