Las primeras botellas producidas en República Dominicana para cervezas están listas y con ello va quedando atrás la “crisis del vidrio” que condujo a una merma en el abasto de la bebida a nivel nacional, consecuencia directa de factores de logística a nivel mundial.
Para su fabricación se han utilizado técnicas de gran avance, que incluyen, por ejemplo, un porcentaje de material reciclado, y se ha empleado gas natural como energía para los procesos, en vez de combustibles fósiles.
Se trata de las primeras botellas producidas en República Dominicana, desde el año 2008, cuando había sido cerrada la fábrica de ese tipo de producto, explicó Luis Álvarez, vicepresidente ejecutivo de Cervecería Nacional Dominicana, en una visita realizada al director del periódico elCaribe, Nelson Rodríguez. Estuvo acompañado de Bethania Ortega, gerente de Relaciones Públicas de la empresa cervecera.
La planta no está inaugurada todavía. Se espera que esa parte se realice en un evento de gran dimensión próximamente. Sin embargo, ya se están utilizando botellas hechas en suelo dominicano, por manos dominicanas.
No se tiene de momento la capacidad productiva que se quisiera, porque se está apenas en el orden del 40 %. Son dos líneas en estos momentos, de la cual está funcionando una de forma completa y la otra está en proceso de ajuste u homologación; proceso este que podría tardar de dos a tres meses.
Lo que se hace en casos como el de la fábrica de botellas donde hay dos líneas, es que primero se arranca una, para estabilizar el horno, y luego se arranca la otra. Con dos líneas, naturalmente, se saca mucho más vidrio del horno; se tiene que ir gradualmente aumentando su capacidad de “cocción”, su temperatura y su capacidad de extracción de vidrios, indicó Álvarez en la conversación.
Y agregó: “Estamos por el camino correcto para solucionar el problema de faltante de botellas en el país. Queremos tener la cerveza disponible como la quiere el dominicano. Sabemos que eso no fue así el año pasado, las razones se conocen; tuvimos escasez de botellas a nivel mundial. Trajimos botellas de todas partes”, recordó el ejecutivo de la empresa.
Entre los lugares de los que fue necesario importar el envase figura Europa, de naciones como España, Portugal, Grecia, Islas Canarias, y de Centroamérica, de Costa Rica, de Suramérica… de Perú, Colombia, Ecuador, de México, hasta que con este arranque de la fábrica comienza a disminuir la importación.
En unos 30 días se tendrá toda la capacidad disponible, ha calculado Cervecería. Es una noticia alentadora y positiva, si se toma en cuenta que en este tiempo de pandemia y de crisis del vidrio, la marca estuvo trabajando muy “justo a la medida” (significa que el producto que se elaboraba era un producto que salía, sin quedar en reserva), pero ya tiene el equivalente a varios días de inventario.
“Me siento bastante confiado en decir que ya estamos solucionando el tema de disponibilidad en el mercado”, expuso el vicepresidente ejecutivo.
Cuando se escasearon las botellas, Cervecería Nacional tuvo que recurrir un poco más al uso de latas y colocó distintos tamaños, como forma de que el consumidor tuviera opciones. De que la gente encontrara cervezas para tomar.
Una vez normalizada la situación, para el caso de los vidrios, la empresa mantendrá las mismas presentaciones típicas de sus botellas, que son la jumbo, la de tamaño regular y la pequeña (es decir los envases de litro, de 12 onzas y de 22 onzas). En ocasiones la firma tiene una presentación de 8 onzas.
Desarrollar un molde de botella, como el usado por Cervecería, toma mucho tiempo, no se trata de querer hacer uno y listo, de acuerdo con las explicaciones ofrecidas por Álvarez. De hecho, el molde de botella no se hace localmente y, en el caso del envase mostrado en el diálogo de ayer, toma de tres a cuatro meses desarrollarlo. Después que se desarrolla ese molde viene entonces un proceso de homologación, que toma tres meses, aproximadamente.
En otra parte de la conversación el ejecutivo explicó que, en el caso referido, existe un proceso de homologación para la botella y un proceso de homologación para la planta en el proceso. Por eso toma tanto tiempo un proceso de homologación general.
Una situación que inició en 2020 y que se supera
El problema que se confronta con las vidrieras viene desde octubre de 2020, el mismo año que la Cervecería había firmado un acuerdo con Caribbean Glass Industry para reactivar la industria de vidrio del país, que estuvo fuera de función. El hecho de que tome tiempo homologar las botellas explica en gran manera por qué, a pesar de que la planta comenzó a producir vidrio en diciembre del pasado año, hasta hace varias semanas todavía no se había concluido del todo y no se contaba con las botellas que el mercado demanda desde que la pandemia complicó el abastecimiento mundial.
Hace poco más de un mes, una de las dos líneas de la fábrica local de botellas está completamente certificada de que cumple con los requisitos de calidad, y por eso Cervecería está haciendo el anuncio sobre la producción de botellas hechas en la República Dominicana.
En paralelo, se está haciendo la homologación de la segunda línea, que debe estar en los próximos 30 días, de acuerdo con los cálculos realizados.
