El abogado Julio Franjul acusó a miembros de una familia de apellido Guerrero de ser quienes lo secuestraron la tarde del miércoles, en su oficina en la calle Duarte de la comunidad de Baní y en la cual dos de los presuntos delincuentes fueron abatidos a tiros.
El jurista sostiene que la familia Guerrero tiene más de dos años hostigándolo por unos terrenos en la que ellos aseguran son propietarios pero no tienen ninguna documentación.
Mientras, el abogado dice que esas tierras -que ascienden a más de tres mil tareas y están ubicados en la provincia Peravia- son propiedad de sus allegados desde hace más de cien años.
Franjul en una entrevista que tuvo con elCaribe narró que todavía se siente adolorido por los golpes y empujones que recibió a manos de sus cuatro agresores, quienes aparentemente lo sacaron de su oficina a punta de pistola y lo trasladaron en una yeepeta a una montaña en las proximidades del Cruce de San Juan.
Señaló también que tan pronto el abogado de 64 años fue secuestrado, los vecinos se percataron y le dieron seguimiento llamando a la Policía Nacional que de inmediato dio con su paradero y enfrentó a los malhechores.
En este choque entre agentes y los supuestos secuestradores, murieron Juan Leonardo Pimentel y Abraham Rafael Soto; fue apresado Juan José Guerreo y Alberto Luis Pérez huyó del incidente.