Aunque los expertos recomiendan llamarlo arte islámico, no es sorpresa para nadie que el nombre de arte árabe sea el más popular. Dentro de sus características se destaca que es un arte iconoclasta, porque el Dios único en el que creen los musulmanes no se puede representar en imágenes. No hay, por tanto, imágenes en las artes plásticas, ni en el interior de sus mezquitas.
De igual forma, podrás percatarte de que es anti naturalista: se trata de recrear, a través del arte, un ambiente puramente religioso, donde no cabe la representación de la realidad. Es, por tanto, una manifestación del misticismo y la espiritualidad. Por ello abundan las composiciones geométricas y abstractas.
Se destaca en un número relativamente limitado de formas simples, muchas de las cuales pueden ser usadas intercaladas en diferentes medios. Estas formas básicas son de nuevo elaboradas a veces hasta un grado extraordinariamente complejo.
A continuación te presentamos los puntos claves de éste, con la finalidad de que lo reconozcas a simple vista:
1. La ornamentación geométrica. Siguió el trabajo de los matemáticos árabes, que fueron los más notables del mundo medieval. La base de muchos de los patrones geométricos es una estrella central con las puntas mirando en todas las direcciones para formar una compleja red de líneas que se cruzan entre sí. En todos los casos el objetivo era el mismo: romper el espacio bidimensional en partes pequeñas para agradar a la vista y retar a la mente.
2. Los motivos vegetales. Se utilizan ampliamente en el arte y la arquitectura islámica, pero sus artistas no buscan la similitud con el mundo natural, al contrario, procuran dar a sus diseños una apariencia abstracta e irreal.
3. La caligrafía. Es considerada en el mundo islámico como la expresión artística más apreciada porque otorga una forma visible a la palabra revelada de Dios. En el primer capítulo del Corán, Dios es descrito como el Todopoderoso «que enseñó al hombre a través de la pluma».
4. La cerámica de colores y la azulejería. Importantes herencias del arte árabe, todavía visibles en algunas salas de la Alhambra (Granada, España), y recreadas en los escenarios dispuestos para su apreciación.
5. El arco de herradura. Quizá uno de los símbolos más reconocidos de este estilo artístico. Un arco circular, cerrado en la parte inferior. Fue la época de los visigodos el momento en el que se impulsó el uso de este tipo de arco, y desde ahí pasó al arte hispanomusulmán, al mozárabe, al mudéjar…
6. Artes industriales. El arte textil se desarrolló ampliamente, en especial la confección de telas de lujo, bordadas en oro y plata. Además de los talleres especializados en la creación de mosaicos, vidrios ornamentales, trabajo en metal y talla en madera.
7. Cúpula. Un elemento importante de la arquitectura islámica. Procede de la arquitectura Sasánida y de las tradiciones paleocristianas. La primera mezquita monumental se conoce con el nombre de cúpula de la Roca (Jerusalén, finales del siglo VII).
8. De exhibición. El Museo de Arte Islámico de El Cairo alberga una de las colecciones más importantes de arte islámico del mundo con piezas que datan desde el siglo VII hasta fines del siglo XIX. En Francia, el Museo del Louvre inauguró el pasado año un Departamento de Arte Islámico. Y el Museo Británico de Londres es uno de los museos que conservan un mayor acervo artístico de esta cultura.
