Fading Gigolo

Al ver a Woody Allen en la promoción del filme, inmediatamente se puede uno suponer que se trata de un filme más de su espléndida cinematografía.

Al ver a Woody Allen en la promoción del filme, inmediatamente se puede uno suponer que se trata de un filme más de su espléndida cinematografía. En realidad le vemos haciendo de él mismo, con toda su gracia y su manera de ver al mundo, siempre en tono sarcástico, sobre todo con su condición de judío. Al inicio, y en la primera hora se siente un buen ritmo y entretiene, luego va decayendo. Es que se aventura a dos explícitas vías narrativas, además de una tercera que es netamente satírica sobre la evolución de un individuo que ha perdido su trabajo para convertirse en aprendiz de prostituto. Tiene algunos elementos a su favor, como son los interludios musicales entre secuencias, un majestuoso diseño de producción con el uso de colores vivos y en fuertes contrastes y algunos clichés bien usados en raccords que emulsionan bastante bien en pasajes humoristas. Lo mismo va para la cinematografía que es sobradamente elegante.

El filme no procura más que divertir, aunque ambiciona abordar quebrantos morales de los personajes en subtramas que confunden la historia que da pie al filme. El resultado es el vagabundeo de personajes en escenas falsas pues no llevan a ninguna parte que no sea crear espacio-tiempo con miras a tener un largometraje.  Hay una constante de presentar la cultura judía y el confronto con sus manifestaciones ideológicas frente a individuos de otras etnias, como la negra en donde uno de los judíos marca presencia en su relación directa con familias negras. Todo lo que vemos es humor corrosivo que muestra una obvia interferencia de Allen en la escritura de los diálogos, pues son todas sus salidas a cada situación en las que él mismo se mofa de sí mismo. Elemental, básico el uso de historias dramáticas con visiones burlescas  que nos retrotraen al cine de Todd Solons y su exposición de “las oscuras debilidades de la clase media estadounidense periférica”.  Aunque la comparación es desatinada, por ser Solons un maestro que sabe tridimensionalizar a sus personajes, a diferencia de John Turturro, guionista y director y protagonista de este filme, vale la mención para entender lo que es crear buenos personajes frente a los clichés que vemos en esta película.

HH Guion y Dirección: John Turturro. Género: Comedia. Duración: 90 minutos.

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