Un amigo residente en el extranjero, quien se encuentra en el país estos días, me hizo hincapié en la informalidad que reina en las relaciones profesionales o de negocios en nuestro país. A diferencia de otras naciones, observa, aquí la palabra dada se viola deportivamente. Se incumple el compromiso recurriendo a la mentira sin mínimo pudor. Eso construye una perjudicial atmósfera nacional de desconfianza e incredulidad. Se dirá que no todos somos así, pero lamentablemente debemos reconocer que entre nosotros la doblez y la desfachatez son regla en vez de excepción. Es reflejo de nuestra entronizada crisis de valores y nuestra escasa visión en lo relativo a que el país solamente cambiará si cada dominicano enfatiza en su particular rectitud.
Informalidad criolla
Un amigo residente en el extranjero, quien se encuentra en el país estos días, me hizo hincapié en la informalidad que reina en las relaciones profesionales o de negocios en nuestro país. A diferencia de otras naciones, observa, aquí la palabra…