Cuando existe una deficiencia de vitaminas en el organismo pueden presentarse enfermedades como la ceguera nocturna, anemia y también hemorragias. Las vitaminas son nutrientes necesarios para el buen funcionamiento celular del organismo y, a diferencia de algunos minerales, actúan en dosis muy pequeñas.
De las 13 vitaminas diferentes que se conocen actualmente, podemos diferenciar dos grupos distintos: por un lado las vitaminas hidrosolubles, como la vitamina C y el grupo de las B. Éstas se disuelven en el agua, ya que el organismo no puede almacenarlas, es necesario un aporte diario o controlado debido a que el exceso es eliminado por el sudor y la orina.
El otro grupo de vitaminas es el de las vitaminas liposolubles que se disuelven en grasas como la vitamina A, D, E y K. Éstas se almacenan en los tejidos adiposos y en el hígado. A diferencia de las vitaminas hidrosolubles, el exceso de su consumo puede ser muy perjudicial para nuestra salud, ya que nuestro cuerpo almacena su exceso.
De acuerdo con la cosmiatra y doctora Maribel Ángeles, propietaria del centro que lleva su nombre, los seres vivos necesitamos ciertas cantidades de vitaminas que se obtienen de los diferentes grupos de alimentos, como frutas y verduras. “El secreto para mantener una salud de hierro y sentirnos alegres, fuertes y sanos; es verificar que tu alimentación sea variada (mezcla colores, olores y sabores), que sea suficiente (no te saltes ninguna comida, respeta tus horarios) y que esté bien equilibrada”, dijo Angeles, a la vez que dijo que si se consumen siempre productos frescos y naturales, dispondremos de todas las vitaminas necesarias y no necesitaremos ningún aporte adicional en forma de suplementos de farmacia o herbolario.
El consumo de tabaco, alcohol o drogas en general provoca un mayor gasto de algunas vitaminas, por lo que en estos casos puede ser necesario un aporte suplementario.