El hipismo dominicano corre el riesgo de languidecer y algunos ya entienden que puede ser por una larga temporada.El gerente del Hipódromo Quinto Centenario, Otto Peña, consideró que la mejor forma de evitar un colapso total es que las partes envueltas se sienten y buscar soluciones viables.
“El punto en que está el hipódromo no es para colocarse en una línea recta”, sostienes, aludiendo a que hay que flexibilizar por todas las partes.
Manifestó que ha recibido acusaciones de desvío de fondos, razón por la cual accedió a la realización de una auditoría por un personal sugerido por la Federación Nacional de Dueños de Caballos de Carrera y en la que a la fecha no se encontró nada. Los dueños de caballos le han pedido al presidente Danilo Medina la destitución de Peña.
Investigación
Aun cuando el primer mandatario no ha recibido al gerente del hipódromo, al menos se ha designado una comisión con el fin de realizar una investigación. El viceministro Henry Molina encabezó dicha comisión.
Los resultados de la investigación aun se desconocen, al menos públicamente, y se encuentran a nivel del Congreso.
En lo que esa documentación es observada, Peña, apunta, tiene las puertas abiertas. “Tenemos que sentarnos”, señala. “Cuando era dueño de caballos pensaba que el dinero se iba por una llave y al llegar aquí es que cambia mi perspectiva”. Con respecto a cualquier acercamiento, apunta, “ahora mismo estamos en cero”.
Un punto a mejorar, señala, “es la población caballar”, la cual ronda los 300 caballos (y bajando pues algunos dueños retiran sus ejemplares), cuando al menos debe de ser de 900 caballos. Fruto de la crisis -se le deben 13 programas a los dueños de caballos-, apunta Peña, ha recibido “amenazas de muerte”, incluso por el Facebook.
