El problema del analfabetismo (1 de 3)

Hace algunas décadas existía la falsa creencia de que la educación solo era rentable en la niñez y en la adolescencia y que en consecuencia, era un error invertir recursos en la educación del adulto. Partiendo del tradicional aforismo de que…

Hace algunas décadas existía la falsa creencia de que la educación solo era rentable en la niñez y en la adolescencia y que en consecuencia, era un error invertir recursos en la educación del adulto. Partiendo del tradicional aforismo de que “los niños son los hombres del mañana”, es cierto que no debe descuidarse la educación de los infantes, pero tampoco la de los adultos si partimos del principio de que “en las manos de los adultos reposa el desarrollo de los pueblos”.

Confieso que en mis primeros años de maestro creí en la equivocada tesis de descuidar la educación del adulto, pero me convencí de mi equivocación y me uní a un grupo de valiosos educadores que, encabezados por el destacado andragogo venezolano, doctor Félix Adam (EPD), luchamos a nivel latinoamericano para desterrar el ofensivo y lastimoso adagio que reza:  “Loro viejo no aprende a hablar”.

El analfabetismo tiene una íntima relación con el subdesarrollo de los pueblos, por lo que se afirma que la educación es la base del desarrollo. Ciertamente lo decía hace más de dos siglos el libertador de América Simón Bolívar: “un pueblo ignorante es instrumento de su propia destrucción”. Pero el analfabetismo no solamente es un problema educativo, sino también social, económico, político y cultural.

Otro grave problema que encontramos especialmente en algunos países latinoamericanos es la discriminación con los grupos indígenas. La dificultad que presentan estos grupos es que para ser alfabetizados primero hay que castellanizarlos, para luego proceder a alfabetizarlos, como es el caso de algunos países centroamericanos y sudamericanos.

Aunque en los últimos 10 años el alfabetismo creció en Latinoamérica del 89 al 91%, no es menos cierto que todavía existen 35 millones de analfabetos, lo que sigue siendo un serio problema educativo para la región.

Una prueba fehaciente la encontramos en los países colonizados e independizados por Inglaterra y Holanda, en los cuales el índice de analfabetismo es casi simbólico, los cuales viven en gran parte del turismo.

Indudablemente que los índices de analfabetismo en los diferentes países del mundo tienen mucho que ver con la inversión del gasto público en educación. No puedo obviar el caso específico de la República Dominicana en lo que al analfabetismo se refiere, con una población de 9,614,607 habitantes, tiene una población analfabeta de 718,462, lo que representa un 11.2% de analfabetismo.

Sin embargo, mi experiencia en este campo me permite afirmar que es relativamente fácil reducir nuestro índice de analfabetismo por las siguientes razones:

1) La concientización, que a partir del primer Plan Decenal de Educación, iniciado en mi gestión como secretario de Educación (1989-1991), cuando diferentes sectores nacionales, principalmente el empresarial, comenzaron a ver la educación como una gran inversión y no como un gasto.

2) Aunque con sus diferencias regionales, en todo el país se habla el castellano y no hay grupos indígenas que hablen sus propios dialectos. Tampoco existen en el territorio nacional, como en otros países del mundo, animales salvajes que puedan poner en peligro la vida de los alfabetizadores que vayan al campo a alfabetizar a sus semejantes.

3) Cualquier lugar del territorio nacional es completamente accesible a pie, por vía terrestre, aérea o marítima.

4) El apoyo oficial, personal y moral que ha dado el ciudadano presidente, licenciado Danilo Medina, tiene que ser apoyado y aprovechado por la sociedad en general, pues creo que con excepción de Cuba ningún otro país de nuestra área ha recibido un apoyo tan contundente y valioso a favor de la educación y la cultura del pueblo.

Como estamos viviendo la “era del conocimiento”, la mayoría de los países del mundo están dedicando sus mayores aportes y sus mejores esfuerzos a favor de una actividad que como la alfabetización puede ser el áncora de salvación para elevar el nivel cultural y educativo de la humanidad.

Por lo expuesto precedentemente es que Rotary International, que ayudó a desterrar la poliomielitis en el mundo, ha decidido apoyar moral y económicamente, a través de su Fundación Rotaria, la reducción del analfabetismo mundial, pues su pensar es que la “alfabetización es el primer paso hacia la libertad y que el analfabetismo es, en sí mismo, una toma de prisión y hasta de esclavitud, pues hace 150 años estaba absolutamente prohibido enseñar a los esclavos a leer y a escribir”.

Posted in Sin categoría

Más de

Más leídas de

Las Más leídas