¿Qué es un buen ciudadano?

Comparto con ustedes una reflexión que hiciéramos en el primer programa de radio que hiciéramos este año, a propósito de las metas que se proponen las personas al iniciar un nuevo año. Algunas en su lista han incluido el  ser mejor ciudadano.

Comparto con ustedes una reflexión que hiciéramos en el primer programa de radio que hiciéramos este año, a propósito de las metas que se proponen las personas al iniciar un nuevo año. Algunas en su lista han incluido el  ser mejor ciudadano.

¿Que significa esto?

Un buen ciudadano ama su país, por el cual asume un comportamiento de compromiso, participando activamente en la elaboración de políticas públicas que garanticen la organización de  su  comunidad,   a fin de garantizar un estado de  derechos y deberes. Le llamamos “ciudadanía activa”, porque va más allá de haber nacido en un país, es una persona que tiene sentido de pertenencia y que está siempre en la búsqueda de conocimientos que les permiten asumir su rol de manera informada en los espacios que  están acorde con su preparación.

Ser un buen ciudadano exige vivir apegado a los valores cívicos y éticos fundamentales, como son: justicia, honestidad, responsabilidad, solidaridad,  como  base para la convivencia humana en  paz. Esto significa pensar en el bienestar colectivo, respetando las diferencias sin exclusión de ningún ser humano.

El buen ciudadano tiene conciencia de la importancia de cuidar el medio ambiente como patrimonio de todos.

A ser un buen ciudadano se aprende en la familia, en el vecindario, en los grupos de pares, en el colegio, en fin en todo el proceso de desarrollo de la personalidad, donde cada uno de estos espacios contextuales dejan su legado. De ahí, que un buen ciudadano se preocupa por su crecimiento personal, que le lleva a poder dar más calidad en su relación con  los demás.  Es una persona con autonomía moral, que sabe hacer uso de la libertad para el bien suyo y de sus conciudadanos. 

En síntesis, un buen ciudadano asume los Derechos Humanos como su guía; así como, en nuestro caso particular, la Constitución del país, como marco regulatorio para el buen vivir.

Posted in Sin categoría

Más de

Más leídas de

Las Más leídas