Si cuantificáramos quién personalmente ha hecho mayores aportes para que el pueblo dominicano supere los efectos sanitarios, económicos y sociales del coronavirus, tendríamos que coincidir que es Luis Abinader.
Concretamente, Luis se comprometió con el gobierno a habilitar por cuenta personal 5 hospitales tipo campaña, para ampliar el número de camas de atención a los infectados. De esos 5 hospitales le han sido autorizados 2, que están operando. Aún espera autorización para levantar los otros 3. Junto al PRM solicitó la importación de 40 mil pruebas de contagio para distribuirlas gratuitamente a centros médicos y a profesionales de la salud, de las que han sido entregadas entre 23 mil 25 en todo el país, en una labor que coordina el doctor Mario Lama.
Donó 26 ambulancias para el servicio en 26 de las principales ciudades del país, y ha entregado Equipos de Protección Profesional a médicos, enfermeras y bioanalistas de la capital y otras zonas.
Félix Antonio Cruz Jiminián, “el médico del pueblo”, felicitó a Luis por verlo en los medios recorriendo gran parte del país llevando medicamentos, material de protección al personal de salud, mascarillas, guantes, protectores faciales, productos desinfectantes e higiénicos y raciones alimenticias que ha puesto en manos de sacerdotes, monjas, pastores evangélicos y centros hospitalarios y asistenciales, en el programa Ruta Solidaria.
“Te felicito, Luis, porque esas ayudas no tienen propaganda política en tu favor, y las depositas desinteresadamente en manos confiables de los religiosos y el personal de salud”, le dijo.
La ayuda de Luis ha sido con aportes familiares, de amigos y colaboradores, sin sangrar los fondos públicos, o recursos que pudieran provenir de oscuros contratos originados en el tráfico de influencia y la corrupción administrativa.
Hay otros aportes menos tangibles pero no menos importantes.
Al día siguiente del gobierno anunciar acciones sobre el Coronavirus, Luis expuso medidas complementarias, como masificar y aplicar gratis las pruebas de contagio y otras previsiones sanitarias.
Propuso además crear un fondo de contingencia para transferir 10 mil pesos mensuales a quienes perdieran sus ingresos por la parálisis económica, y otras medidas estatales con fondos que propuso debían provenir de recorte de gastos prescindibles y reasignaciones presupuestarias.
Suspender el pago de tarifas de servicios públicos y acordar con los bancos cesación de pago de intereses y mora, mientras estuviese paralizada la actividad productiva, y otorgar incentivos a las empresas y a las personas para compensar costos de la emergencia.
Y, colocándose por encima de las conveniencias políticas propias, exhortó al gobierno a organizar una cumbre del liderazgo nacional para aunar propósitos dirigidos a concertar una estrategia común frente a los devastadores efectos del COVID 19.
Como puede observarse, con hechos, propuestas y entrega honesta, nadie ha hecho tanto, personalmente, ni recorrido palmo a palmo el país, como Luis Abinader, para ayudar al pueblo a superar al coronavirus, en todos los órdenes.
