La terapia láser es ideal para las personas que desean borrar sus tatuajes de manera segura y eficaz
Hacerse un tatuaje y luego arrepentirse, le ha pasado a muchas personas. Y aunque antes no existían los métodos para removerlos, en la actualidad hay diversos tratamientos con láser que pueden hacer de ese sueño una realidad.
Para conocer más sobre el tema, la dermatóloga cosmiatra, Michelle Herrera, respondió a las siguientes interrogantes::
Con los avances que contamos, ¿es posible borrar un tatuaje?
En la actualidad contamos con equipos láseres de última generación que permiten remover pigmentos satisfactoriamente. La terapia láser es ideal para las personas que desean borrar sus tatuajes de manera segura y eficaz, el mismo genera pulsos de energía con una longitud de onda específica, actuando solamente sobre las partículas de pigmento de tinta que absorben la energía y estallan, fragmentándose en otras de un tamaño más pequeño, de ese modo unas células especiales de nuestro organismo llamadas macrófagos las engloban para luego descomponerlas y eliminarlas.
¿Qué se toma en cuenta para proceder?
Se toman en cuenta varios parámetros para poder someterse al procedimiento.
- La decisión de retirarlo. En algunos casos la persona no está decidida a decir adiós al tatuaje y presenta la siguiente inquietud ¿puede aclararse y no eliminarse? En esos casos, se prefiere explicarle que el aclaramiento y reducción del pigmento es irreversible y que inicia desde la primera sesión.
- Desea hacer otro tatuaje. Un 40 % de las personas que eliminan un tatuaje desean realizar otro tatuaje en la misma área, ya sea porque quiere mejorar detalles del tatuaje, color o simplemente desea cambiarlo. En esos casos es importante determinar y demarcar específicamente que áreas del tatuaje desea borrar.
- Tiempo de realizado el tatuaje. Es el aspecto más importante porque debemos esperar seis meses para comenzar el proceso de borrado con láser.
- Se toma en cuenta cicatrices previas y manchas en el área tatuada. En muchos casos la intención de hacer un tatuaje viene porque se tienen cicatrices ya sea por cirugía, estrías o simplemente ocultar ciertos tipos de manchas.
- Cantidad de retoques realizados y los tatuajes que se usan para disimular con tinta color blanco o piel, debido a que en casos de correcciones, por ejemplo, de estrías con tinta clara no se pueden remover con láser.
¿Qué tanto importa la ubicación del tatuaje y el color de la piel de la persona que desea remover el tatuaje?
Existen zonas del cuerpo que tienen mejor respuesta al láser y esto se debe a que las áreas que tiene mayor circulación sanguínea tienden a desvanecer la tinta más rápido. En mi experiencia rostro y cuello son los que tienden a eliminarse con más rapidez. Por lo tanto, las zonas distales tales como manos, tobillos y pies son los que tardan más en desaparecer.
También, cada día es más frecuente encontrar en la consulta mujeres que desean remover cejas tatuadas, con trabajos previos de micropigmentación y en otros casos de microblading mal realizados. En esos casos generalmente se utilizan mezclas de tintas que pueden hacer más difícil el proceso de remoción del tatuaje en las cejas.
¿Cuáles son los más fáciles y cuáles son los más difíciles de remover?
Cuando vamos a remover un tatuaje con láser se toma en cuenta el color, tamaño, profundidad del dibujo, diseño, tipo de tinta utilizada, color de piel y respuesta inmunológica del individuo, entre otros.
El color y el tamaño son factores muy decisivos a la hora de trabajar un tatuaje con láser. Los tatuajes de colores oscuros como negro, azul y verdes son más fáciles de tratar y tienen mejor respuesta.
Los colores rojo, amarillo y naranja son más resistentes y deben ser tratados con piezas especiales como el KTP, longitud de onda 532 nanómetro (nm).
Los tatuajes de colores blanco y crema prácticamente no responden satisfactoriamente a los láseres.
De igual manera es más rápido remover un tatuaje de pequeño tamaño a diferencia de un tatuaje más grande y con trazos y diseño muy definido.
¿A cuántas sesiones se debe someter el paciente?; ¿de qué depende el número?
El número de sesiones que hacen falta para eliminar un tatuaje dependerá de varios factores, como color, antigüedad del mismo, composición, tamaño y profundidad de la tinta, además de la idiosincrasia de cada persona. En tatuajes pequeños se requieren de 4 a 6 sesiones y más grandes de 7 a 10.
El intervalo para la realización entre una sesión y otra es de 6 a 8 semanas para dar tiempo al organismo a que reabsorba la mayor cantidad de tinta posible.
Durante el proceso, antes y después, ¿la persona debe llegar algún tipo de tratamiento o recomendaciones?, ¿cuáles?
- Previo a la sesión de laser no se recomienda tomar sol ni utilizar cámara de bronceado por lo menos 15 días antes.
- El procedimiento está contraindicado en pacientes que están en tratamiento con isotretinoína.
- Luego del tratamiento se recomienda el uso de una crema regeneradora y antibiótica.
- Debe esperar 15 días para realizar actividades relacionadas a natación incluyendo playas, piscinas y ríos.
- No exponer el área a la energía solar.
- Evitar el rascado y en caso de que se produzca alguna costra debe esperar que se elimine espontáneamente sin tratar de ninguna manera de desprenderla
Al momento de culminar el proceso, ¿cómo describe el aspecto de la zona donde estaba ubicado el tatuaje?
Acabado de realizar el procedimiento existe un aclaramiento transitorio conocido como escarchado (frosting) luego de unas horas se siente calor en el área tratada, puede haber eritema (enrojecimiento) e inflamación. Suele desaparecer en las primeras 24 horas luego de realizado el procedimiento.
¿Existen peligros al eliminar un tatuaje con láser?
El láser es un tratamiento seguro y efectivo, siempre y cuando el paciente siga las recomendaciones y acuda a un médico especialista y con experiencia.
