Cada Visita Sorpresa sella un pacto sagrado. Recuperamos el valor de la palabra empeñada.
El gobierno se compromete y cumple. Las comunidades y asociaciones también.
Superar asistencialismo genera participación. Y fuerte democracia de abajo hacia arriba.
Dignificamos sueños y carencias viejas. Nuestra gente es protagonista de su desarrollo.