Aceras y bancos destruidos, escombros y enormes huecos que ponen en peligro a los peatones, describen el abandono predominante en la acera sur de la avenida 30 de Mayo.
Desde el antiguo parque Manresa en el kilómetro 12 de la carretera Sánchez hasta la Dirección General de Pasaportes en la avenida Jiménez Moya, el abandono es latente la falta de mantenimiento por parte del Ayuntamiento del Distrito Nacional, cuyas brigadas concentran su atención en las plazas Güibia y Juan Barón y la zona que concentra la oferta hotelera en el litoral sur.
La situación ha propiciado que indigentes utilicen el espacio público para improvisar casuchas que son utilizadas por las prostitutas que venden su cuerpo a orillas del mar Caribe.
Gran parte del área verde frente a la casa cultural de España es un depósito donde se vierten materiales de construcción, cajas y toda clase de desechos sólidos, una preocupación latente al celebrarse hoy el día de limpieza de costas y playas.
Pese a que en reiteradas ocasiones el Cabildo ha anunciado acciones para recuperar esta parte de la avenida 30 de Mayo, no se ha visto ningún resultado. La falta de vigilancia y la oscuridad por las noches propicia el ambiente de inseguridad en el lugar.
El lugar es un vertedero
Vecinos aseguran que desaprensivos llegan desde otros sectores a botar basura, animales muertos y hasta vísceras de pollos. “Yo he visto guaguas vaciando sacos de perros muertos, caballos, pilas de papeles y tripas de pollo, parece que al ayuntamiento no le duele esta zona.
Uno tiene por necesidad que quemar porque el mal olor llega hasta el otro lado”, asegura Wellington Valdez, residente en la urbanización Miramar.
Las áreas de parqueo en la zona están inhabilitadas por muros tipo New Jersey que bloquean su acceso.
Existe un proyecto para construir campo de golf
En enero pasado el exsecretario general del Distrito Nacional, Domingo Contreras, dijo que el cabildo cuenta con un plan elaborado por la Federación Dominicana de Golf que busca recuperar el tramo de la avenida 30 de Mayo, convirtiendo la zona en un pequeño campo de golf. No obstante, a la fecha no se ve más que basura, ramas de árboles secas, escombros y descuido.
